San Pedro Sula, Honduras
'Vendame' es una palabra que todos asocian con una pulpería, esos pequeños negocios que hay en todos los barrios, donde se encuentra desde una aguja o almidón hasta productos de consumo básico.
Sin embargo, esto no era lo único que se vendía en una pulpería del barrio Medina Concepción, de San Pedro Sula, al norte de Honduras.
Entre las latas de sardinas y las ristras de ' churros' (bocadillos salados), una hondureña también ofrecía una variedad de productos que hoy la llevaron a la cárcel.
Dania Velásquez está acusada de vender un polvo blanco en su pulpería. No, no se trata de harina, leche, almidón o fécula de maíz, ella distribuía droga desde la ventanilla de su negocio.
Luego de una denuncia anónima, las autoridades de la Dirección de Lucha contra el narcotráfico (DLCN) montaron un operativo de vigilancia sin que la dueña de la pulpería se percatara.
El 27 de junio se inició la investigación por tres días logrando confirmar que en efecto se realizaban las típicas transacciones de compra-venta de drogas. El pequeño negocio estaba bien surtido al disponer de cocaína, marihuana y piedras de crack para la venta menudeada.
El pasado 30 de junio las autoridades allanaron la vivienda descubriendo que en el interior de una refrigeradora, en una bolsa plástica, habían 65 mil 370 lempiras de distintas denominación.
Asimismo se le decomisó 34 envoltorios de bolsas plásticas en cuyo interior había polvo blanco, y más de 39 envoltorios de hierba seca, supuesta marihuana.
'Vendame' es una palabra que todos asocian con una pulpería, esos pequeños negocios que hay en todos los barrios, donde se encuentra desde una aguja o almidón hasta productos de consumo básico.
Sin embargo, esto no era lo único que se vendía en una pulpería del barrio Medina Concepción, de San Pedro Sula, al norte de Honduras.
Entre las latas de sardinas y las ristras de ' churros' (bocadillos salados), una hondureña también ofrecía una variedad de productos que hoy la llevaron a la cárcel.
Dania Velásquez está acusada de vender un polvo blanco en su pulpería. No, no se trata de harina, leche, almidón o fécula de maíz, ella distribuía droga desde la ventanilla de su negocio.
Luego de una denuncia anónima, las autoridades de la Dirección de Lucha contra el narcotráfico (DLCN) montaron un operativo de vigilancia sin que la dueña de la pulpería se percatara.
El 27 de junio se inició la investigación por tres días logrando confirmar que en efecto se realizaban las típicas transacciones de compra-venta de drogas. El pequeño negocio estaba bien surtido al disponer de cocaína, marihuana y piedras de crack para la venta menudeada.
El pasado 30 de junio las autoridades allanaron la vivienda descubriendo que en el interior de una refrigeradora, en una bolsa plástica, habían 65 mil 370 lempiras de distintas denominación.
Asimismo se le decomisó 34 envoltorios de bolsas plásticas en cuyo interior había polvo blanco, y más de 39 envoltorios de hierba seca, supuesta marihuana.
+Capturan supuesta distribuidora de drogas dentro de la UNAH
La mujer fue detenida de inmediato y esta semana se le dictó auto de formal procesamiento y prisión preventiva por el delito de tráfico de drogas en perjuicio de la salud pública.
