TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Vistiendo un “overall” blanco partió este martes 31 de enero hacia Estados Unidos el exedil de Yoro, Arnaldo Urbina Soto, donde enfrentará varios cargos por narcotráfico ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York, Estados Unidos.
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En la extradición número 36 que se registra en Honduras desde que se firmó un acuerdo, la segunda de 2023, hubieron algunas incidencias que destacan de las otras extradiciones realizadas. Por ejemplo, el exedil de Yoro vistió con traje de bioseguridad, aunque su entrega ocurre en momentos cuando la pandemia del covid-19 ha reducido su incidencia, contrario al momento en que fueron llevados otros hondureños entre 2021 y 2022, incluido el expresidente Juan Orlando Hernández.
Además previo a ser entregado a los agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA) Urbina Soto no fue presentado ante las cámaras de los medios ahí presente, como ha ocurrido en otros casos, esto debido a las fuertes medidas de seguridad, e incluso su caminata desde la base aérea hasta la aeronave fue un misterio hasta el último momento pues no estaba claro por donde saldría.
Por otro lado, el hondureño Urbina Soto, mientras caminaba rumbo al avión se limitó a comunicarle al comisionado Miguel Pérez Suazo, quien caminaba a su lado, que “los medios me han hecho famoso, ya estoy acostumbrado” en una actitud relajada.
El hondureño enfrenta cargos en una Corte del Distrito Sur de Nueva York por los delitos de conspirar para traficar cocaína a Estados Unidos, usar y llevar ametralladoras y dispositivos destructivos durante el apoyo al tráfico de cocaína y conspirar para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos en apoyo de la conspiración para traficar cocaína.
Dentro de las opciones en materia penal que tiene en esa nación está declararse culpable, someterse a un juicio donde la Fiscalía de Nueva York presentará las pruebas en su contra y su defensa podría desvirtuarlas o que sea testigo de la Fiscalía en algún caso de otro hondureño extraditado previamente.
