Fue el llamado del Cardenal Óscar Andrés Rodríguez en la homilía del primer Domingo de Ramos que se celebró en el Parque Central de Tegucigalpa, frente a la Catedral.
El religioso pidió levantar los ramos para dejar entrar a Jesucristo en el corazón, al mismo tiempo que comparó a los hondureños con las personas que adoraban a Jesucristo en el primer Domingo de Ramos, pero que posteriormente gritaba 'Crucifíquenlo'.
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“Qué triste que esa actitud se pueda repetir en nuestra Honduras, tantos que no quieren abrir su corazón al amor y prefieren encerrarse en el odio, en la violencia”, expresó.
Andrés Rodríguez pidió a los compatriotas que en esta Semana Santa seamos como Simón de Cirene y cargar la cruz de Cristo, la de uno mismo y de las personas.
“Somos cirineos para algunos, ayudamos a algunos a llevar la pesada cruz de la enfermedad, pobreza extrema dolor de la pérdida de un ser querido, de madres y padres que lloran por la pérdida de un hijo por la violencia de hoy o somos indiferentes como aquellos que pasaron al lado de Jesús burlándose”, exclamó.
El líder de la Iglesia Católica aconsejó a los feligreses dejar tiempo para asistir a los actos religiosos para dedicar tiempo a quien dio la vida por la humanidad en la cruz.
El mensaje de Óscar Andrés Rodríguez fue escuchado por miles de hondureños que asistieron a la homilía de este primer Domingo de Ramos que se realizó en el Parque Central.