Los monigotes son elaborados por Marco Tulio Donaire con la colaboración de su esposa, Consuelo Martínez, desde hace más de 53 años.
Los monigotes llevan camisa, pantalón, saco, corbata, zapatos formales o tenis, otros llevan gorras y bufandas.
Este año Marco Tulio decidió colocarle a cada muñeco mensajes con los actos de corrupción que causaron indignación entre la población durante este año de pandemia.
Entre las frases más populares se encuentran “¿Dónde está el dinero?” y “¿Y los hospitales de agachón?”, refiriéndose a los compra y mala calidad de los hospitales móviles.
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También escribió mensajes como “Se van”, en alusión al actual gobierno nacionalista que perdió las elecciones.
Los “años viejos” que van sentados en una silla de madera tienen un precio de entre 1,000 lempiras a 1,200. En el caso de los que están de pie se mantienen en 800 lempiras.
“Es un trabajo arduo que inicia desde marzo, para que queden bien mi esposo le pone esmero y los viste como ningún otro y tiene precios accesibles desde 800 lempiras hasta 1,200 lempiras”, declaró Consuelo Martínez, quien se encarga de comprar la ropa de los “años viejos”.
Esta pareja trabaja en su vivienda del barrio La Sabana. Allí empiezan a amasar el barro para hacer el molde del rostro del monigote. Luego lo rellenan con papel periódico y aplican papel estraza para hacer las arrugas, nariz, boca, orejas y los ojos. Posteriormente hacen el cuerpo con tablas de madera, y luego los visten de forma elegante.
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