TEGUCIGALPA, HONDURAS.-El valle de Sula está sumamente vulnerable a la lluvia.
La reciente inundación mostró que no hay que confiarse, pero entre el mal, los pronósticos apuntan que una situación similar es difícil que se vuelva a presentar por ahora.
Francisco Argeñal, titular del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), explicó a EL HERALDO que la reciente inundación fue producto de una vaguada que se posicionó en la zona noroccidental.
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El fenómeno acarreó lluvias en las partes altas del territorio, lo que ocasionó que las vertientes de los temidos ríos Ulúa y Chamelecón volvieran a desbordarse sin escrúpulos.
Hay que tomar en cuenta que los bordos y proyectos de mitigación en el valle de Sula están destruidos por lo que el paso del agua es prácticamente libre para volver a causar desgracias en la zona.
Argeñal explicó que aún en las partes altas de Choloma continúa lloviendo, pero con menor intensidad.
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Explicó que la vaguada que ocasionó la inundación poco a poco se comenzó a disipar.
Advirtió que se pueden presentar lluvias, pero en menor escala.
En referencia a una posible nueva inundación, el experto destacó que por ahora no es probable, pues sin la vaguada las lluvias bajarán y por ahora no hay fenómenos en el interior del país que puedan ser detonantes para daños.
Argeñal recordó que hay temporadas de frentes fríos y eso también contribuyó a que los acumulados de agua suban.
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Explicó que para esta semana se tiene contemplada la llegada de un nuevo frente frío, por lo que se espera un descenso en las temperaturas en la mayor parte del país.
El experto comentó que a medida que pasen los días se esperan que los niveles de las aguas en las zonas inundadas comiencen a descender para comenzar a realizar limpieza.
Reiteró que según los pronósticos a los que tienen accesos a corto plazo se pueden identificar fenómenos que puedan contribuir a revivir las desgracios que ocasionó Eta e Iota y las demás vaguadas que inundaron el valle de Sula.
Empero recomendó a las personas que viven en zonas vulnerables mantenerse alerta, esperar las notificaciones de las autoridades sobre los niveles de los ríos y los acumulados de lluvia porque aún están bajo emergencia y con una alta vulnerabilidad a cualquier fenómeno climático.
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