Este lunes retornarán a Honduras alrededor de 306 migrantes provenientes de Estados Unidos y México.
Por la vía aérea llegarán procedentes de El Paso, Texas, 40 hondureños de 18 unidades familiares, conformadas por 18 mujeres, así como 13 niñas y 9 niños con edades comprendidas entre los 18 meses y los 15 años.
El vuelo aterrizará en el aeropuerto de San Pedro Sula, Ramón Villeda Morales, y será recibido por la primera dama Ana García, quien encabeza la Fuerza de Tarea de Migrantes.
Mientras que los otros 266 deportados, entre niños y adultos, llegarán por la vía terrestre procedentes de México y distribuidos entre 7 y 9 autobuses que ingresarán a Honduras por la frontera de Corinto, limítrofe con Guatemala.
Una comitiva del gobierno hondureño les dará la bienvenida y garantizará un retorno digno.
Previo a la llegada de estos hondureños deportados, el Comité Permanente de Contingencias (Copeco) y Unicef instalaron carpas especiales de asistencia humanitaria, como parte de los preparativos para su recepción.
Las carpas se ubicarán en el aeropuerto Villeda Morales y en el albergue principal localizado en San Pedro Sula.
Los deportados recibirán atención médica, asistencia jurídica, vivienda, alimentación y educación, anunció Copeco.
Además, se les otorgarán kits de higiene familiar que incluyen jabón de baño, jabón de lavar ropa, papel higiénico, bolsa para basura, toalla sanitaria y cepillo dental, como parte de una alianza de Unicef y Visión Mundial.