Tegucigalpa, Honduras
El presidente de la República, Juan Orlando Hernández, anunció que ampliará el plazo de vigencia a la Comisión Especial para el Proceso de Transformación y Depuración de la Policía Nacional para continuar con la reestructuración de dicha institución.
De acuerdo a lo expresado por el mandatario, en los últimos acercamientos que ha tenido con los miembros de la Comisión les dijo que “la tarea de la depuración no se iba a resolver en el período para que les habíamos nombrado”.
A renglón seguido manifestó que “yo esperaría que estuvieran dispuestos a continuar ese esfuerzo”.
De acuerdo al decreto de emergencia, el período de vigencia de la Comisión es de un año, no obstante, este se estaría ampliando en los próximos días.
Hernández no detalló por cuánto tiempo se estaría ampliando el período a la Comisión a través del Congreso Nacional.
“Ya hablamos con ellos para seguir en la tarea, ellos están dispuestos, habrá que evacuar la parte formal, la parte legal y es parte de lo que vamos a hablar con el Congreso”, dijo Hernández.
Sobre el particular, Omar Rivera, miembro de la Comisión, dijo a EL HERALDO que “si el Presidente de la República y el Congreso Nacional deciden extender la duración de la gestión, estamos en la plena disposición de seguir sirviendo para consolidar este proceso de reedificación de la Policía Nacional”.
Reforma
No obstante, “la reforma del sistema de educación de oficiales a través de la Academia Nacional de Policía (ANAPO) y la Universidad Nacional de la Policía de Honduras (UNPH), la identificación de los líderes del futuro de la Policía Nacional y la definición de una nueva mística en la gestión policial, requieren un poco más de tiempo, y si se nos da la oportunidad de contar con unos meses más, seguramente lograremos estos importantes cambios”, reconoció.
La Comisión fue nombrada por el Poder Ejecutivo el 12 de abril de 2016. Hasta la fecha, el ente depurador ha evaluado a 3,004 agentes de la Policía Nacional, entre oficiales y elementos de la escala básica.
En ese sentido, en ocho meses de trabajo los depuradores han cancelado a 2,091 elementos de la institución policial. De estos, 1,601 fueron depurados por reestructuración, es decir, que ya no caben en la estructura organizacional de la institución y en muchos de los casos por tener cuentas pendientes con la justicia.
Mientras que otros 207 agentes fueron removidos por causa justa, 27 aún se encuentran en disponibilidad y 256 se retiraron voluntariamente de la Policía Nacional.
De acuerdo a un informe brindado por la Comisión, el 46 por ciento de los depurados son oficiales de alto rango.
Uno de los grandes desafíos del ente depurador para el año es concluir con la evaluación de los integrantes de la escala básica, el personal administrativo y de servicios generales de la Policía Nacional y de la Secretaría de Seguridad.
Este proceso de reestructuración no le ha generado ningún costo económico al Estado hondureño. No obstante, se ha erogado más de 300 millones de lempiras en concepto de prestaciones laborales a quienes han sido despedidos de la institución.
Un esfuerzo es la depuración, el otro es la certificación de la Policía Nacional, eso lleva a otra tareas.