Tegucigalpa, Honduras
Más de dos mil muertes a nivel nacional se han reportado en el país bajo la categoría de indeterminadas, lo que representa que la tasa de homicidios podría ser mayor a la registrada por la Policía Nacional.
Según los registros del Sistema Estadístico Policial en Línea (Sepol) en los años 2013, 2014 y 2015, se registró un total de 2,048 muertes indeterminadas a nivel nacional.
Una muerte es considerada como indeterminada cuando al momento de hacer una autopsia no hay resultados contundentes sobre la causa del deceso, por lo que es necesario realizar exámenes histopatológicos y de laboratorio toxicológico de cada uno de los cadáveres.
La histopatología consiste en estudiar en un microscopio los tejidos orgánicos y las anomalías que se detecten.
En el año 2013 se contabilizaron 711 casos de muertes indeterminadas, en el 2014 fueron 542 y el 2015 se reportaron 795 casos, respectivamente.
Si esos casos se suman a las muertes violentas identificadas plenamente como homicidios, la tasa de estas muertes aumentaría para esos años.
En 2013, Sepol contabilizó 6,431 homicidios, pero si se le sumaran las 711 muertes indeterminadas de ese año, el total de fallecimientos violentos sería de 7,142 homicidios.
De igual manera si a los homicidios que se registraron el 2014, que fueron 5,891, se le suman las 542 muertes violentas no determinadas, la cantidad se incrementa a 6,433 homicidios.
Mientras que en 2015 se contabilizaron 5,148 homicidios , cifra que hubiera subido a 5,943 si se contabilizaran los 795 decesos indeterminados.
En esos mismos tres años, la Secretaría de Seguridad reportó una baja considerable de la tasa de homicidios, pues en 2013 fue de 77.45 homicidios por cada cien mil habitantes.
Para 2014 la tasa bajó a 69.58 por cada cien mil habitantes y en 2015 esa cifra se redujo a 60.02 por cada cien mil habitantes, lo que fue considerado como un importante logro para las autoridades en materia de seguridad.
Mayor incidencia
De acuerdo a los datos proporcionados por las autoridades policiales, los departamentos de Francisco Morazán y Cortés son los que reportan la mayor cantidad de muertes indeterminadas. Para el caso, en Francisco Morazán en los mismos tres años se reportó un total de 951 muertes indeterminadas.
En 2013 se reportaron 298 muertes indeterminadas, en 2014 se contabilizaron 265 y en 2015 hubo un aumento y se registraron 388 muertes indeterminadas en ese departamento.
Por su lado, en Cortés la cifra que se reportó fue de 422 muertes indeterminadas.
Mientras que los departamentos con menor incidencia de muertes indeterminadas son Ocotepeque con 21 y Gracias a Dios con dos. En Gracias a Dios en el 2013 no hubo muertes indeterminadas, pero en 2014 y 2015 se reportó una muerte indeterminada cada año.
Reporte
De acuerdo a los datos proporcionados por la Dirección de Medicina Forense, desde 2009 hasta la fecha se contabilizan 3,129 muertes indeterminadas de un total de 17,973 cuerpos sin vida que fueron enviados para que se les practicara la autopsia.
Los cadáveres que fueron ingresados a la morgue capitalina llegaron de las zonas centro, sur y oriente del país.
EL HERALDO conoció que en año 2015 fue cuando se contabilizó la mayor cantidad de muertes indeterminadas con 515 casos.
Mientras que en 2009 las muertes indeterminadas fueron 378.
En lo que va del año 2016, las autoridades de Medicina Forense reportan al menos 166 muertes indeterminadas.
Especialista
Gonzalo Sánchez, especialista en criminología, detalló que “las muertes indeterminadas son aquellas en las que no se conocen las verdaderas causas del porqué una persona perdió la vida o que el médico forense no está claro y por eso se deben realizar las investigaciones”.
Mencionó que entre esos casos de muerte indeterminada se pueden mencionar los cadáveres en estado avanzado de putrefacción o las osamentas que han sido encontradas y en las que las personas tienen varios meses de haber perdido la vida.
Otra de las situaciones que se puede presentar es cuando el especialista en patología tiene dudas sobre si una muerte ha sido producto de un homicidio o de un suicidio.
En este caso es cuando se deben realizar las investigaciones científicas y con ello poder determinar las causas de muerte, consideró.
“Hay casos que se puede aparentar que es un suicidio, pero que en realidad fue un homicidio o viceversa”, dijo Sánchez.
Las muertes indeterminadas se deben concluir ya que en algunos casos se deben cobrar seguros de vida y las aseguradoras no realizan los desembolsos mientras no se esclarezcan las muertes.
“Cuando el especialista en patología tiene dudas sobre la muerte de una persona, la Policía debe realizar una investigación exhaustiva para determinar las causas de muerte”, aseguró.
“A mí me parece que para efectos de investigación, las cifras de muertes indeterminadas que se registran son muy elevadas, pero a través de las investigaciones se puede determinar si una persona perdió la vida a causa de un proyectil que impactó en el cráneo o por un golpe”.
El exinvestigador considera que cuando no se determina la causa de muerte de una persona no se puede llevar a cabo un requerimiento fiscal contra un supuesto responsable de un hecho criminal, por lo que se deben realizar las diligencias del caso.
En Honduras más del 80 por ciento de las muertes violentas son provocadas con armas de fuego y eso se ha podido comprobar a través de las autopsias
