Unos 240 deportados más llegaran este viernes a Honduras en dos vuelos diferentes procedencia de Estados Unidos.
El grupo se sumará a los 135 que ya fueron retornados esta semana desde el país del norte, según estadísticas del Centro de Atención al Migrante Retornado (CAMR).
En lo que va del mes, el número de deportados se aproxima a 1,500 hondureños, según personal de migración.
Este sería el tercer conjunto de hondureños retornados durante la primera semana de gobierno de Donald Trump.
Esta mañana llegó el primer vuelo con 110 hondureños y en horas de la tarde arribará otro avión transportando a los 130 restantes.
Entre los deportados viene cuatro personas que están vinculadas a hechos criminales en Honduras, de acuerdo a autoridades de frontera.
Se trata de Raúl Andino Moncada sobre quien pesa una orden de captura con fecha 6 agosto de 2014.
Mientras que a Jorge David Flores Rodríguez se le acusa por el delito de tentativa de homicidio simple en perjuicio de cinco personas, hecho ocurrido el 22 de julio del año 2013 y por el que era buscado incluso por la Interpol.
También fue aprehendida Kathia Solano Alvarenga por falsificación de documentos. Y finalmente a Julio Cesar Osorto por el delito de desobediencia, orden de captura emitida el 24 agosto de 2015.
El vuelo con los connacionales arrestados aterrizó en el aeropuerto Ramón Villeda Morales de San Pedro Sula donde les esperaban autoridades de la Dirección Policial de Investigación (DPI) e Interpol, y posteriomente fueron remitidos a la sección de capturas en la estación policial de Cortés.
+La amenaza de México si Trump insiste en que pague por el muro
Tema del muro bajo secreto
Mientras que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y de Estados Unidos, Donald Trump, acordaron este viernes en una llamada telefónica no hablar más en público sobre el polémico muro fronterizo, señaló un comunicado de la presidencia de México.
Ambos mandatarios 'reconocieron sus claras y muy públicas diferencias de posición' sobre el muro que Trump quiere construir en la frontera para detener la migración ilegal y que insiste en que debe pagar México. También acordaron resolver esas divergencias y 'ya no hablar públicamente' del tema, apuntó la presidencia en la nota.