TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Argumentando que cuentan con preparación y tienen la “capacidad necesaria” para brindar seguridad y manejo de situaciones y eventualidades, las autoridades del Hospital Escuela justificaron este miércoles el cambio de seguridad interna en ese centro asistencial.
Asimismo, informaron que la nueva contratación del personal se basó en la evaluación de perfiles, capacitación y selección para cada cargo o puesto de seguridad.
El Hospital Escuela aseguró que la nueva seguridad fue capacitada en “atención al paciente con orientación en derechos humanos, sensibilidad social, respeto a la figura humana y técnicas de seguridad hospitalarias sin utilización de armas de fuego o letales”.
“Este hospital ha contratado y capacitado al nuevo personal de seguridad interna, quienes se rigen bajo las normativas, lineamientos y estructuras de los manuales de procedimientos de seguridad hospitalaria interna que posee el máximo centro asistencial del país”, dice parte del comunicado.
La institución se comprometió a “escuchar los reclamos y denuncias” por parte de los pacientes del hospital, para lograr identificar las necesidades de seguridad que se presenten y así brindar una “respuesta oportuna”.
Cabe destacar que este cambio en las medidas de seguridad generó una ola de críticas y controversia, con varios sectores señalando la falta de preparación del nuevo personal para resguardar el centro asistencial y la presencia de los conocidos colectivos del partido Libertad y Refundación (Libre) en el centro asistencial.
Colectivos de Libre formarían parte de la seguridad del HE
Críticos como congresistas, el gremio médico y la sociedad civil alertaron al gobierno actual sobre la colocación de sus colectivos, sin preparación alguna en el área, en posiciones clave de seguridad y que garanticen una verdadera protección a los pacientes que día a día buscan atención en el máximo centro asistencial del país
El sindicato de trabajadores del Hospital Escuela expresó su descontento, señalando que habían solicitado un cambio en las medidas de seguridad, pero nunca esperaron que se emplearía a personas sin la preparación adecuada. Destacaron que al hospital llegan privados de libertad y que el nuevo personal “desconoce los protocolos necesarios”.
“Nosotros pedimos un cambio, pero no se contrató una empresa, sino gente que no está capacitada para brindar seguridad al hospital”, manifestó Mauricio Corrales, presidente del sindicato del máximo centro asistencial del país.
Por su parte, el Partido Nacional rechazó las decisiones tomadas por la Secretaría de Salud (Sesal), manifestando su desaprobación ante la sustitución del personal de seguridad y tildó al personal como “grupos paramilitares”.
Por su parte, la ministra de Salud, Carla Paredes, defendió la medida, argumentando que representa un ahorro significativo para el Estado al prescindir de una seguridad costosa, y sostuvo que no es un pecado colocar a la gente de Libre en buenos trabajos.
“¿Que se ha dado trabajo a personal de nuestra base? Dígame, ¿cuál es el pecado? Por lo tanto, pertenecer a un partido político no les da derecho a criminalizarlos”, expresó Paredes.
