TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Un juez del Juzgado de Privación de Dominio de Bienes de Origen Ilícito falló a favor del Estado de Honduras para lograr el comiso de más de cuatro millones de dólares pertenecientes a Axel Gamaliel López.
López de origen guatemalteco fue quien realizó la acción de compra venta de los hospitales móviles que fueron adquiridos por el Estado de Honduras durante lo más álgido de la pandemia de covid-19 y que al final no sirvieron para ese objetivo.
Este capital se encuentra en tres cuentas bancarias en el banco JP Morgan en los Estados Unidos y que deberá de ser trasladado a las arcas del Estado de Honduras ahora que quedó firme la sentencia de extinción de dominio del mismo.
Solicitud de Honduras
La cifra solicitada por Honduras es de 101,777,602 lempiras, equivalentes a unos cuatro millones de dólares, que le fueron asegurados al chapín en el sistema financiero de Estados Unidos.
El Ministerio Público explicó que se trata de “dinero plenamente identificado en la cuentas de banco de JP Morgan Chase, de Elmed Medical System Inc, de Elmed / Gammatech International Inc y de Vertisa Medical Waste Technology Llc”, las cuales fueron congeladas por orden del Departamento de Justicia de Estados Unidos y la Corte de Washington D.C., tras una medida impulsada por Honduras en marzo de 2021.
Para lograr el fallo favorable, el MP evacuará 87 medios de prueba y se espera que el dinero sea reintegrado al patrimonio del Estado hondureño como parte del resarcimiento que merece tras el millonario fraude que sufrió luego de que se compraran las estructuras a un alto precio y sin que cumplieran con las especificaciones y condiciones prometidas.
Caso hospitales móviles
Axel López es el representante de Elmed Medical System Inc, empresa con la que se hizo la compra de los centros médicos para atender a los pacientes de la pandemia durante su etapa más difícil.
El 8 de abril de 2021, Axel López, Marco Bográn y Alex Moraes fueron acusados por la compra irregular de los siete hospitales móviles y siete plantas de tratamiento por más de 47 millones de dólares, cuyo costo real, según las investigaciones, fue de 26 millones de dólares. Es decir, hubo una sobrevaloración de más de 21 millones.
Y es que Bográn y Moraes, exdirector y exadministrador de Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), respectivamente, hicieron en acuerdo sin cumplir con los procesos de compra correspondientes, sin asegurarse de la garantía de calidad, aceptando equipos vencidos y deteriorados y sin que hasta la fecha exista un hospital móvil funcional.
Bográn y Moraes fueron detenidos, pero aunque existe una orden de captura en contra de López, este continúa gozando de su libertad, pese a que en Honduras es acusado por el supuesto delito de fraude en contra de la administración pública.