Tegucigalpa, Honduras. No se habían recuperado del golpe de las lluvias de la tormenta Sara, cuando un centenar de familias del occidente y norte del país nuevamente son afectadas por inundaciones producto de lluvias generadas por una masa de aire frío sobre el territorio nacional.
El fenómeno natural, propio de la época de fin de año, según los meteorólogos, estará dejando lluvias y temperaturas frías durante el próximo fin de semana. Esto genera mucha preocupación en las personas que viven en zonas inundables en el litoral atlántico.
Hasta el mediodía de este viernes, un centenar de personas que viven en Quimistán, Santa Bárbara, así como en Baracoa y Choloma, Cortes, ya están sufriendo las consecuencias de las lluvias.
El alcalde de Quimistán, Rubén Pacheco, explicó que producto de los últimos aguaceros en su municipio, una persona murió el jueves reciente, por lo que ya van dos víctimas si se suma otra que falleció el 27 de noviembre por los mismos problemas que generan las lluvias.
Igualmente contabilizó 59 comunidades inundada en su municipio, el cual considera que tiene la red hídrica más extensa del país. Él espera que los pasos hacia algunas comunidades queden habilitados una vez baje el caudal de los ríos.
No obstante, unos 30 sectores quedarán incomunicados durante más tiempo “porque tenemos que esperar a que mejoren las condiciones para poder subir la maquinaria”, detalló.
Afirmó que ya se está desplazando maquinaria hacia los puntos críticos. Unos 19 presentan derrumbes, socavones y hay crecidas de los ríos que también mantienen incomunicada la parte norte, donde el Río Cuyamel es el que más daños causado en la red vial. El edil cree que al menos unas 30,000 personas de Quimistán son actualmente afectadas por el fenómeno climático.
Las lluvias también ya golpean nuevamente a unas 30 familias en la comunidad de Cerritos, en Baracoa, Cortés. Personas que estaban recuperándose del impacto de las lluvias dejas por Sara, nuevamente están viviendo el impacto de las inundaciones, relató Elizabeth Ayala, una de las afectadas.
Recordó que desde octubre algunas familias comenzaron a abandonar la comunidad debido a las inundaciones. Unas regresaron, pero otras todavía están albergados en el centro comunal, en la escuela, otras siguen alquilando para estar a salvo, dijo Ayala.
En Choloma, otras 10 viviendas de igual número de familias también se reportaron como inundadas, pero no se dieron más detalles de su situación.
Actualmente la Comisión Permanente de Contingencia (Copeco), mantiene alerta amarilla para los municipios de Omoa y Puerto Cortés, en Cortés; mientras que los demás municipios, así como Atlántida, Colón e Islas de la Bahía siguen en alerta verde porque las lluvias van a continuar este fin de semana.