Tegucigalpa, Honduras.- Los pacientes oncológicos deberán esperar aún más para contar con el acelerador lineal prometido por el gobierno de la República.
Inicialmente planificada para marzo de 2025 en el Hospital San Felipe, la entrega de la máquina fue postergada hasta junio del mismo año.
Este no es el primer retraso en el proyecto del búnker que albergará el equipo necesario para tratar el cáncer en Honduras.
La ministra de Salud, Carla Paredes, había prometido que la infraestructura estaría lista para finales de 2024, mientras que su antecesor, Manuel Matheu, había fijado la entrega para principios de ese año.
El director del Hospital San Felipe, Nelson Sánchez, señaló que el proceso de construcción y equipamiento del búnker es un reto complejo debido a las limitaciones en infraestructura y especialización técnica.
“El procedimiento, la infraestructura, el equipamiento y el funcionamiento del búnker es un tema complejo. El área de infraestructura está limitada en cuanto a especialización”, afirmó Sánchez.
Explicó que se han sostenido cinco reuniones virtuales con la empresa encargada de traer el equipo desde México y con el equipo del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), responsable de la construcción del búnker.
Sánchez adelantó que la fundición del espacio donde se instalará el acelerador lineal podría finalizar en enero, siempre y cuando se obtenga la aprobación del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), quien supervisa los lineamientos técnicos del proyecto.
El acelerador lineal se espera en el país para febrero de 2025, y su puesta en funcionamiento dependerá de que no ocurran más retrasos técnicos o problemas con los proveedores.
El personal encargado de operar la máquina ya ha sido contratado y capacitado, lo que permitirá iniciar operaciones en junio, según lo programado.
“Esperamos que todo esté listo para junio, siempre y cuando no surjan problemas técnicos o retrasos con las empresas proveedoras”, dijo Sánchez.