TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Ante incertidumbre que atraviesa el Congreso Nacional debido a la parálisis, la directora del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) Gabriela Castellanos, se sumó a la ola de denuncias surgidas contra el oficialismo por pretender atentar contra la institucionalidad.
Luego de cumplir 59 días de mantener paralizado el CN, desde diversos sectores de sociedad civil y las bancadas de oposición, han manifestado que el letargo legislativo conforma parte de una estrategia de Libertad y Refundación (Libre) para llevar al órgano unicameral a una crisis profunda.
“El plan esta trazado y hay manos oscuras tras de el, no sigan cayendo en la trampa lo que buscan algunos grupos de poder es liquidar la democracia disolviendo el CN y ustedes (diputados) al permitir que sigan paralizadas las sesiones”, advirtió.
Castellanos cuestionó a los parlamentarios de oposición y argumentó que “se la están poniendo muy fácil, recuperen el hemiciclo y pasen a la historia como lo que debieran ser verdaderos padres de la patria, ya va siendo hora que devenguen”.
De su lado el diputado nacionalista Mario Pérez, no descartó que “existe el temor no podemos dejar de decirlo, pero eso constituye un delito alto y grave, esperemos que no se llegue a esa locura”, respecto a pretensiones de disolver el CN.
En anticipación a cualquier intención de atentado contra el CN, el texto Constitucional establece que ningún órgano, institución u otro Poder del Estado representado, podrá intentar disolver el Legislativo.
“Ni el mismo Congreso, ni otra autoridad del Estado o particulares, podrá impedir la instalación del CN, la celebración de sesiones o decretar su disolución. La contravención de este precepto constituye delito contra los Poderes del Estado”, dicta el artículo Constitucional 193.