TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En respuesta a las recientes decisiones del gobierno de Libertad y Refundación (Libre), el Partido Nacional de Honduras (PN) ha convocado a una marcha para el próximo viernes 6 de septiembre, en lo que han denominado una acción de protesta y “alerta permanente”.
La convocatoria fue anunciada durante una conferencia de prensa en el Comité Central Ejecutivo del Partido Nacional, donde líderes del partido expresaron su preocupación y rechazo hacia la administración actual.
El jefe de bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, fue claro al señalar que esta movilización es una respuesta directa a lo que consideran una amenaza creciente a la democracia hondureña.
“Vamos a salir a las calles las veces que sea necesario, a partir de este día nos declaramos en alerta permanente”, afirmó Zambrano, quien detalló que la marcha iniciará a las 5:00 p.m. desde la colonia Kennedy en Tegucigalpa, capital de Honduras.
Durante su intervención, Zambrano denunció que el gobierno de Libre busca llevar al país hacia una “polarización inédita”, advirtiendo sobre la posibilidad de una disolución de poderes y la convocatoria a una Asamblea Constituyente, lo cual, según él, pondría en riesgo la estabilidad del país.
También expresó su preocupación por la reciente decisión del gobierno de derogar el tratado de extradición con Estados Unidos, señalando que dicha medida pone en entredicho el compromiso del país con la justicia internacional.
“El PN nunca tomó la decisión de eliminar la extradición, porque nunca hemos puesto los intereses familiares primero que los intereses nacionales”, subrayó Zambrano, reiterando que el partido permanecerá en constante vigilancia y protesta ante cualquier acción que considere contraria a los intereses del país.
Por su parte, la diputada Lissi Cano leyó un comunicado oficial del partido en el que se acusa al gobierno de Libre de proteger a individuos ligados al poder mediante la derogación del tratado de extradición.
Además, el comunicado sugiere que el traslado de Rixi Ramona Moncada al Ministerio de Defensa tiene como objetivo consolidar el control de las Fuerzas Armadas con apoyo de la inteligencia cubana y venezolana.
En el mismo documento, el Partido Nacional asegura que el gobierno de Libre ha entrado en una fase de “pánico”, y no descartan que puedan intentar montar un fraude electoral o generar una crisis política profunda con miras a prolongar el mandato de la presidenta Xiomara Castro mediante un autogolpe.
“Honduras no es Venezuela”, concluye la misiva, destacando que las fuerzas de oposición están listas para enfrentar cualquier intento de desestabilización, incluso si ello implica sacrificar sus vidas en las calles del país.
