TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El expresidente de Honduras, Porfirio Lobo, manifestó este martes que su esposa, Rosa Elena Bonilla, debe guardar prisión domiciliaria a raíz del estado de salud en el que se encuentra por la muerte de su hijo, Said Lobo, una de las víctimas de la masacre ocurrida el pasado 14 de julio.
Un visiblemente afectado exmandatario hondureño, manifestó que la muerte de su hijo ha sido un duro golpe para toda la familia, indicando además que la situación que actualmente atraviesa la ex primera dama es bastante complicada.
“Ella está bastante complicada, es un hijo que ha perdido de forma inesperada y el Tribunal ordenó una evaluación y se está cumpliendo con esa orden. Todo esto ha sido un golpe muy fuerte para la familia”, indicó Lobo mientras se encontraba a las afueras de las instalaciones de Medicina Forense.
A su vez, el expresidente mencionó que su esposa no está apta para seguir recluida en la cárcel de mujeres en Támara, lamentando la posición de los fiscales detrás del caso.
“Ella debe estar fuera. El otro día escuche a un fiscal diciendo que no hay que mezclar los sentimientos, eso es falso, uno que tiene hijos sabe que duelen y pedir a una madre que sea indiferente no tiene sentido. Si el fiscal que está para defender a la población no puede ver el dolor de los hondureños estamos complicados”, apuntó Porfirio Lobo.
Para culminar, el expresidente Lobo reconoció que las investigaciones en torno a la masacre en la que murió su hijo siguen en proceso, por lo que tiene la esperanza de que se haga justicia.
Rosa Elena Bonilla es sometida a evaluaciones
La ex primera dama de Honduras, Rosa Elena Bonilla, fue trasladada la mañana de este martes -26 de julio- al Centro de Medicina Legal y Ciencias Forenses en Tegucigalpa para ser sometida a una evaluación física y mental.
Fuertemente custodiada por elementos policiales, Rosita dejó por un momento la cárcel de mujeres de Támara y fue trasladada hasta la morgue capitalina, donde le realizaron un dictamen forense.
La petición fue realizada por un juez de jurisdicción con el fin de determinar si Bonilla está o no en óptimas condiciones de salud.
Recientemente la apoderada legal de Rosa Elena, Deysi Banegas, reveló que su clienta está sumida en una fuerte depresión, encerrada en su celda y sin comer por la muerte de su hijo Said Lobo, asesinado en una masacre junto a otro tres jóvenes el pasado -14 de julio-.
Se presume que la evaluación forense sería para comprobar el estado de salud de Bonilla de Lobo y luego enfrentar la Audiencia de Lectura de Sentencia o bien seguir gestionando el cambio de medidas para que se le otorgue arresto domiciliario.