TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Honduras y China -su más reciente socio comercial y diplomático- han firmado hasta el momento 22 capítulos que conformarán las bases de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambas naciones.
El proceso de negociación tendrá a finales de julio su última ronda de negociación donde está pendiente por aprobar el capítulo de inversión, la normalización y cooperación en materia de evaluación de la conformidad y el anexo de listas de compromisos arancelarios, conoció EL HERALDO.
Los primeros capítulos que se aprobaron fueron el de disposiciones iniciales y definiciones y de comercio de mercancías. Este último habla del intercambio comercial de mercancías entre China y Honduras, así como la regulación de los aspectos sobre el acceso preferencial en materia de derechos arancelarios a la importación en el comercio bilateral.
El capítulo de reglas de origen contiene los criterios para determinar cuándo una mercancía se calificará como originaria de una de las partes a efecto de tratamiento preferencial.
Asimismo, un anexo de reglas de origen específicas por producto para garantizar que las preferencias arancelarias se otorguen únicamente a las mercancías que cumplen con los requisitos de origen.
Hay también un capítulo de procedimientos aduaneros y facilitación del comercio y otro de medidas sanitarias y fitosanitarias, el cual busca promover y facilitar el comercio de productos de origen animal, plantas y productos de origen vegetal.
El TLC contiene un apartado que establece los mecanismos para que las partes protejan sus industrias nacionales contra prácticas desleales de comercio y aumentos abruptos en el nivel de las importaciones.
Sobre el ambiente y comercio se busca la promoción del desarrollo sostenible, reafirmando el derecho soberano de mantener los niveles de protección ambiental sin dejar de hacer cumplir, derogar o relajar las protecciones contenidas en legislación ambiental.
En el capítulo 17, de Transparencia, se publicarán con prontitud cualquier ley, reglamento, procedimientos y resoluciones administrativas de aplicación general que pueda afectar cualquier asunto cubierto por el TLC.
Valoraciones
viceministro de Desarrollo Económico, Melvin Redondo, manifestó a este rotativo que la negociación con China implica un nivel de complejidad debido a las diferencias económicas con Honduras.
En tal sentido, afirmó que “Honduras ha mantenido una posición firme en cuanto a lograr un acuerdo que se convierta en un instrumento de promoción comercial, que no acentúe los desbalances comerciales”.
El funcionario reconoció que los temas de aranceles en productos es el tema más complejo y el que no se ha acordado.
“En materia de derechos arancelarios a la importación de mercancías aún se continua la negociación con el fin de lograr un acuerdo balanceado que considere las asimetrías, las diferencias de desarrollo relativo y los intereses exportadores y sensibilidades productivas de las partes.”.
Reconoció que hay al menos 20 productos que Honduras busca exportar a China y se refirió a los mecanismo de solución de conflictos ante el rechazo a las cláusulas del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI).
“En el TLC existen dos mecanismos para resolver las diferencias: Uno establecido para las diferencias Estado-Estado, que se encuentran de conformidad a la normativa OMC bajo el Mecanismo de Solución de Diferencias de dicho organismo; y el otro, de solución de controversias Inversionista-Estado, en el que aplicarán las reglas de arbitraje CNUDMI, o cualquier otra regla o institución acordada por las partes”, cerró el funcionario.