Tegucigalpa, Honduras
El tiempo perdido se convirtió en el peor enemigo de 975 alumnos de tres carreras de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Este lunes se cumplieron 24 días desde que un pequeño grupo de estudiantes, aglutinados en el Movimiento Estudiantil Universitario (MEU), mantiene tomadas las instalaciones del edificio donde se imparten clases para exigir la derogación total de las normas académicas.
Y “de extenderse (la toma) más días a partir de hoy (ayer) no habría II PAC intensivo” para estas tres carreras, advirtió la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, en conferencia de prensa.
Los afectados con la cancelación del trimestre serían 158 alumnos de Sociología, 165 de Historia y 652 de Trabajo Social.
El segundo período académico inició el 16 de mayo y está previsto que termine el 27 de agosto. Cada período académico dura como mínimo 12 semanas, cada una calculada con base a cinco días.
El tercer trimestre se programó del 7 de septiembre al 17 de diciembre (15 semanas), pero el mismo se convertirá en un período intensivo de nueve semanas para algunas carreras que logren reanudar su clases.
“No habría III período académico intensivo (PAC)” porque no se lograría cubrir el mínimo de tiempo que se establece en el calendario académico, que es de al menos nueve semanas de clases.
En peligro
Si la problemática continúa por la intransigencia de los dirigentes estudiantiles que se niegan a entregar los edificios, otras diez carreras estarían expuestas a que se les cancele un posible período intensivo.
Las autoridades universitarias dieron a conocer que si no se reanudan las clases a partir del 1 de julio las carreras de ingeniería Civil, Eléctrica, Sistemas, Industrial, Mecánica y Química, junto a Psicología, Periodismo, Pedagogía y Antropología, donde hasta ayer habían perdido 21 días de clases, son las otras que podrían perder el tercer período que sería intensivo.
En estas diez carreras, la cantidad de alumnos afectados asciende a 12,261, según dio a conocer a EL HERALDO personal de la UNAH.
Odontología fue la primera carrera que perdió su período, por lo cual resultaron afectados 2,292 estudiantes en vista de que las clases son acompañadas de laboratorios.
Sin diálogo
La rectora recordó que se llamó a los grupos estudiantiles que mantienen tomadas las instalaciones de la universidad a un diálogo abierto y sin condiciones, pero los inconformes, que llegaron a las instalaciones del Polideportivo ,“pusieron condiciones, por lo que para continuar con el diálogo ahora nosotros ponemos las nuestras”.
Los universitarios en protesta demandan la anulación de las normas académicas, que entre otras cosas establecen un índice de aprobación de asignaturas de 65 por ciento (para 2016) y un índice de permanencia de 60 por ciento.
Castellanos dio a conocer que en la jornada de diálogo que se desarrolló el domingo desde las 8:00 de la mañana hasta las 7:00 de la noche “hay varios matices”.
“En primer lugar fue productivo: pudimos ver propuestas académicas serias. Creo que hubo frentes que leyeron perfectamente las normas, no piden su derogación, sino más bien su aplicación, porque saben que son positivas para el desarrollo académico de la universidad”, aseguró la rectora.
Durante la reunión hubo planteamientos “teóricos y conceptuales” y “estuvimos en la tarde, que fue de mucha fuerza, de mucha intransigencia y mucha violencia”, prosiguió.
“Nosotros no vamos a seguir dialogando en un escenario de intransigencia, de amenazas e intimidación, eso no procede entre universitarios y no vamos a seguir en esas condiciones”, enfatizó Julieta Castellanos.
Sin embargo, las autoridades universitarias aseguran que en los centros regionales se va a continuar con el diálogo y se hará de una forma consecuente como universitarios.
Las máximas autoridades aseguran que se ha podido verificar que “no todos los encapuchados son estudiantes universitarios y que ingresaron al salón donde el domingo se desarrolló el diálogo”.
Con relación a los daños provocados en las instalaciones y las denuncias en el Ministerio Público, Julieta Castellanos detalló que las faltas que cometen los estudiantes “se tratan en la universidad” y los delitos “se tratan en el Estado, y por eso nosotros hemos ido al Ministerio Público, no porque estamos en el afán de tener estudiantes detenidos o presos, es porque ellos están en edificios donde hay bienes y hay recursos millonarios y nosotros no podemos responsabilizarnos de esos edificios mientras no estemos en la custodia de esos bienes”.
En cuanto a la propuesta de los integrantes del MEU de crear mesas de diálogo externas, la rectora fue clara al manifestar: “nosotros no delegamos nuestra representación”.
Las autoridades de la UNAH tienen un “desempeño ético, un desempeño ecuánime, muy responsable, comprometido, y somos las autoridades legítimas de la universidad. Nosotros no le delegamos a nadie nuestra representación”, insistió la funcionaria.
El Ministerio Público acusó a 20 personas porque asegura que han provocado daños a los edificios de la UNAH durante las tomas.
Joan Humberto Suazo, estudiante de la carrera de Sociología que participa en las tomas, remarcó que el diálogo entre protestantes y autoridades no prosperará si no se anulan las órdenes de captura contra estos procesados