SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Varios vendedores informales de San Pedro Sula cerraron la avenida frente a la catedral metropolitana de San Pedro Apóstol en protesta en contra de los desalojos por parte de la alcaldía sampedrana para liberar el paso para peatones y vehículos previo a la Semana Santa.
Ante el anuncio de la municipalidad de desalojo, los vendedores se apostaron en la avenida y quemaron llantas para evitar las acciones que pretenden las autoridades de la ciudad industrial.
Un fuerte dispositivo de la Policía Municipal y de la Policía Nacional se apostó en el lugar ante el temor de mayores repercusiones, sin embargo la protesta se dio de forma pacífica, pues se llegó a un acuerdo.
Uno de los vendedores, identificado como Fredy, mencionó que se llegó a un acuerdo de no desalojar. “No nos oponemos al reordenamiento. Nosotros estamos dispuestos a ordenar la ciudad. Siempre hemos estado nosotros de acuerdo”.
“El acuerdo al que se llegó es que no van a tocar ningún puesto, ahorita vamos a remover todo esto. No van a quitar ningún puesto”, afirmó.
De igual forma, mencionó “nosotros somos personas luchadoras, trabajamos del día día, tenemos hijos, tenemos deudas. Que nos dejen trabajar, estamos dispuestos a colaborar siempre y cuando respeten nuestros derechos”.
Los vendedores dijeron que pese al acuerdo, no se moverán de sus puestos para evitar acciones por parte de las autoridades, al mismo tiempo que afirmaron que solo quieren trabajar.
Por su parte, uno de los apoderados legales de los vendedores, sostuvo que hay una sentencia de amparo en favor al sector del comercio informal que “ordena a la municipalidad construir locales comerciales dignos y mercados para reubicar a los vendedores del sector informal”.
Petición de la arquidiócesis
El abogado Pedro Martínez, director de la Policía Municipal, explicó que las acciones son por parte de una petición de la arquidiócesis de San Pedro Sula porque se le va a dar un mantenimiento a la catedral previo a la Semana Santa.
“Se nos imposibilita porque hay unos puestos de comercio aquí. Hemos hablado con los presidentes de los sindicatos sino pueden ayudar por lo menos a que se separen para nosotros poder trabajar con mayor comodidad”, detalló.
Martínez sostuvo que solo se trata de un mantenimiento a la Catedral, por lo que es imposible cumplir con la petición de los vendedores de reubicarlos en otro lado. “Les pedimos cooperación a ellos, pero ya ellos tomaron esta decisión, por lo que vamos a ver qué pasa”.
Asimismo, aclaró que su intención nunca fue desalojar “simplemente cercar alrededor de lo que es la catedral y limpiar”.
