ARIZONA, ESTADOS UNIDOS.- El escalofriante caso de Doris Maricela Aguilar, una joven hondureña que fue asesinada por Juan Cuellar, un supuesto acosador obsesionado con ella, ha generado profunda consternación debido a la atrocidad de este crimen ocurrido en una plaza comercial de Phoenix, Arizona.
Las investigaciones del caso han arrojado datos perturbadores, donde revelan que el hombre dejó una nota antes de matar a la joven y luego quitarse la vida.
Aunque se trata de un asesinato, según las investigaciones, Juan Cuellar trató de armar una cuartada para simular que se trataba de un suicidio.
Según el investigador Steve Fischer, Cuellar buscaba limpiar su culpabilidad, dejando una nota dentro del auto donde fueron encontrados sus cuerpos.
“Trató de montarlo para que pareciera que ella se había suicidado”, dijo Fischer.
El crimen de Aguilar
Aguilar, una joven de 25 años, fue encontrada sin vida y en estado de descomposición en un automóvil junto al cuerpo de su presunto acosador, Juan Cuellar, de 51 años.
Según el relato de la familia de Doris, este hombre la acosaba luego de haberla conocido en el gimnasio al que ella asistía. En reiteradas ocasiones la joven le dijo a sus padres el hostigamiento de este hombre hacia ella y la insistencia en enviarle mensajes diariamente.
Con ese historial perturbador, Doris le dijo a sus padres que si algo le pasaba, él era el responsable. Lamentablemente, las advertencias no fueron suficientes, pues su obsesión acabó con la vida de ella.
Familiares de Doris informaron a los medios estadounidenses que Doris salió de su casa el 1 de julio a eso de las 7:50 de la noche con rumbo hacia una tienda; nunca regresó de nuevo a su hogar.
Luego de una semana, ambos cuerpos fueron encontrados en el estacionamiento de un gimnasio cerca de Phoenix. Se cree que los cuerpos estuvieron en el automóvil durante varios días.