ESCUINTLA, GUATEMALA.- A casi un año de la extraña desaparición de la hondureña Floridalma Roque en Guatemala, su cuerpo fue encontrado este 6 de junio, al interior de una maleta de viaje.
El cuerpo fue ubicado en Escuintla, luego de que el cirujano Kevin Malouf confesara dónde lo había dejado.
El cadáver de la mujer de 59 años fue llevado a la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), para los análisis correspondientes.
Se desconoce el estado en que se hallaron sus restos, pues no se detalló el lugar exacto donde fueron encontrados.
Se desconoce el estado en que se hallaron sus restos, pues no se detalló el lugar exacto donde fueron encontrados.
¿Cómo desapareció Floridalma Roque?
Roque vivía en Estados Unidos desde hace varios años, pero debido a su deseo de cambiar algunas cosas de su cuerpo viajó a Guatemala, donde Malouf tenía su clínica estética.
El 12 de junio ella fue internada para prepararse para la cirugía, que sería a la mañana siguiente. Antes de entrar al quirófano, la hondureña le escribió a su hijo los mensajes: “Hijo lindo, love you”. “A las 7 a.m. me hacen la operación facial”, “Te amo mucho”.
Su hijo le respondió dos horas después con un audio que ella no alcanzó a escuchar.
Cuando una familiar de Roque llegó a la clínica para llevársela tras el alta, el personal médico le indicó que ella ya se había retirado en un taxi.
Incrédulos, los parientes interpusieron la denuncia ante las autoridades y solicitaron videos de las cámaras de seguridad.
Kevin Malouf y su equipo presentaron videos de las cámaras del lugar, en donde se veía presuntamente a Floridalma salir en silla de ruedas y abordar un vehículo.
Sin embargo, las investigaciones del Ministerio Público revelaron después que todo fue actuado. La mujer que salió en silla de ruedas era la enfermera Susana Emilia Rojas, fingiendo ser la hondureña.
Tras abordar el taxi, se bajó unos metros más adelante y abordó el carro del doctor Malouf para después volver a la clínica e ingresar como si nada, ya vistiendo su uniforme de enfermera.
El 28 de julio, el cirujano fue capturado junto a la anestesióloga Lydia Viviana Moreira y los enfermeros Susana Emilia Rojas y Luis Alfredo Castro como cómplices.
Luego, Luis Alfredo Castro confesó que algo salió mal con la cirugía de Floridalma y murió, pero que el doctor intentó ocultar el caso por miedo a que su reputación se viera afectada, pues ya tenía una investigación abierta por la muerte de otra paciente.
Dijo que inicialmente quiso meter el cuerpo de la fémina en una maleta, pero para ello tenía que quebrar sus extremidades, sin embargo, optó por sacarlo en un barril que sacó del lugar como si fuera basura.
El Ministerio Público también mostró videos que muestran al cirujano sacando el recipiente, pero la administración del local dijo que esta tarea le corresponde a los empleados de mantenimiento.
Todas estas pruebas sirvieron para que recientemente Malouf confesara su crimen. Ahora, los parientes de Floridalma esperan una verdadera aplicación de la justicia en el caso que ha consternado a todos.
