JH Barber, la primera barbería hondureña en Córdoba, España

CÓRDOBA, ESPAÑA.- Cuando Jarly Alberth Huete pizaty salió de San Pedro Sula, al norte de Honduras, con rumbo a Málaga, España, jamás imaginó que terminaría emprendiendo y estableciendo una de las primeras barberías instaladas en Córdoba (sur español) propiedad de un hondureño.

Si bien ya antes tenía conocimientos sobre barbería cuando se mudó de su natal Barra Patuka, de Brus Laguna, Gracias a Dios, para la capital industrial con el propósito de estudiar y trabajar, fue en el viejo continente donde se le abrió un mundo de oportunidades.

Hoy con JH Barber aspira abrir más locales y seguir creciendo profesionalmente en el país europeo, que se ha vuelto semillero de oportunidades para catrachos emprendedores. Aunque confiesa que nada fue fácil al principio.

El joven de 29 años inició como barbero hace varios años en algunas barberías del norte, incluso en un barrio sampedrano que “no era muy seguro” confiesa, pero le echaba ganas pues quería estudiar y necesitaba el dinero. Reconoce que nunca se vio dedicado de lleno en la barbería, de hecho, todo empezó “como un hobbie, un juego nada serio pero me daba para vivir”.

Así fue aprendiendo y cuando volvió a su pueblo por algún tiempo puso una pequeña barbería, “solo era una silla nada más”, relata a EL HERALDO.

Tras aterrizar en Málaga en octubre de 2018, junto a su esposa Ana Patricia Rodríguez Rivera y su pequeña hija Grecia Marleny, el compatriota se enfrentó a uno de los principales retos que hay para los latinos en España, conseguir empleo sin tener aún toda su documentación en orden y la residencia.

Aunque su mamá se encontraba en España desde 2014, y ella le había conseguido algunas opciones de empleo a Ana, para Jarly no había trabajo. En Málaga solo estuvieron dos meses y al no poder encontrar empleo se mudaron a Córdoba donde los esperaba doña Estelina Huete Pizaty, para Ana la situación se resolvió a las pocas semanas, sin embargo, Jarly no conseguía nada. “Duré cinco meses sin hacer dinero, buscando como loco” y la oportunidad no llegaba.

Al pedirle su opinión de si son escasos los empleos para hombres en España, Jarly nos comenta que “trabajo hay, pero exigen muchas cosas, la residencia, estar empadronado”, es decir hay que ir legalizando poco a poco porque sin documentos no se consigue nada. En las peluquerías tampoco le daban chance, pues pedían papeles y estar certificado.

El joven reconoce que una de las ventajas de España es que la Educación es gratuita, así que aprovechando eso decidió sacar un curso en una academia y certificarse para estar al día con las distintas técnicas, “el poder estudiar te ayuda incluso a acelerar la obtención de los papeles”, confiesa.

Jarly nos explica que en España no es muy común ver publicidad pegada en cualquier poste o pared, pero si hay lugares donde se permite hacerlo, existen las “tablas de anuncios o tablón de anuncios” donde la gente pone su pequeño rótulo de los servicios que ofrece al público.

“Un día me animé a poner mi anuncio, fui pegando con cuidado”, recuerda. “Los primeros meses nadie llamaba, fue al tercer mes que me comenzaron a llamar para realizar cortes a domicilios o en horas de la noche”, Huete considera que eso -su disposición de atender según la conveniencia de los clientes- le permitió ganar clientela.

Durante los siguientes ocho meses trabajó así, solo a domicilio o atendiendo en horarios en los que la gente podía.

JH Barber, J por Jarly y H por Huete, eso significan las letras de su emprendimiento, así fundó el hondureño su primera barbería ubicada en el barrio Ciudad Jardín, calle Damasco 1 de Córdoba, España, donde atiende de 10:00 am a 2:00 pm y de 6:00 de la tarde a 9:30 de la noche, pero antes de tener su propio local tuvo que dar a conocer su talento y hacerse un nombre entre los clientes.

Tras ocho meses trabajando a domicilio, el joven conoció a un marroquí que le dio la oportunidad de laborar en su local, ahí durante dos años y medio se desempeñó como peluquero y se fue ganando la preferencia de los visitantes que esperaban su turno para que los atendiera Jarlin.

Luego de un tiempo al quedarse sin empleo nuevamente supo que los clientes lo seguían, no importaba si no tenía local sino por su talento. Ahí fue donde las cosas cambiaron “me sentí bien con la gente, empecé a ahorrar y cambié la idea de conseguir un trabajo y mejor pensé en generar un emprendimiento”.

Al consultarle sobre sus metas y sueños, Jarly lo tiene claro. En Córdoba anhela poder abrir una segunda barbería y por qué no expandirse a otras ciudades vecinas.

“Pienso educarme más, aparte de cortes ofrecezco cejas, lavado de cabeza, tinte, decoloración y baños de color, solo para hombres; pero la meta es incluir el servicio de masaje en cápsula de pie a cabeza, trenzas y uñas, ya en esa área sería unisex”, detalla.

Y aunque por el momento en la barbería solo trabaja él, no descarta en el futuro ser generador de empleos con sus metas de ampliar JH Barber.

Mientras que para Honduras sus sueños son igual de ambiciosos. Primero le gustaría invertir en la construcción de apartamentos para alquiler en Comayagua, de donde es oriunda su esposa Ana.

Y en su pueblo natal, Brus Laguna, sueña con llevar un proyecto de cine, y aunque “no sería con la cartelera en premier pero sí de películas de HBO, Netflix, la idea es poder darle esa experiencia completa a las personas” y ofrecer desde unas instalaciones apropiadas hasta un ambiente de sala cinematográfica.

Hoy por hoy el compatriota, con JH Barber y sus sueños de abrir más locales y crecer, desmuestra que el país europeo se ha vuelto un semillero de oportunidades para los catrachos emprendedores.