Las primeras comparecencias serán tres días antes de que un juez federal en San Francisco escuche los argumentos de grupos defensores de inmigrantes para detener la aplicación de la medida, que entró en vigor el 29 de enero en San Diego y se extendió la semana pasada a Calexico, California.
Las autoridades dicen que su intención es ampliar la política a toda la frontera entre México y Estados Unidos.
El cambio ocurre cuando más familias en busca de asilo provenientes de Guatemala, Honduras y El Salvador llegan a la frontera de México con Estados Unidos mientras huyen de la violencia y pobreza generalizadas.
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El cambio se ha introducido lentamente, con un promedio de 40 personas regresadas por semana a Tijuana desde San Diego en las primeras seis semanas. México acordó aceptar hasta a 120 personas por semana.
El cambio sigue a meses de conversaciones en las altas esferas con México sobre las familias que buscan asilo que han sido liberadas en Estados Unidos mientras sus casos demoraban años en la corte inmigratoria.
El gobierno de Estados Unidos espera que se desmotiven las peticiones poco fundamentadas y se reduzca un retraso judicia de más de 800,000 casos al obligar a la gente a esperar en México.
Los críticos dicen que la política obliga a las familias centroamericanas en busca de asilo a esperar en zonas peligrosas como Tijuana, en donde hubo más de 2,500 homicidios el año pasado y provoca otros problemas, como la dificultad de encontrar asesoría legal en México.
México ha dicho que fue una medida unilateral de Estados Unidos, algo que los funcionarios estadounidenses ya reconocen. Sin embargo, las autoridades mexicanas dicen que por motivos humanitarios permitieron que quienes buscan asilo temporalmente esperen en el país.
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Un hondureño en busca de asilo que se presentó para su primera audiencia el martes dijo que la espera estuvo libre de problemas.
'Hasta este momento todo está saliendo bien', dijo después de reunirse con las autoridades de Estados Unidos en el cruce fronterizo de San Diego, el más transitado del país. 'Le agradezco a la abogada porque ella no nos ha dejado solos', añadió.
El hombre solo se identificó como Ariel. Su país natal padece violencia provocada por las pandillas y muchas personas en busca de asilo se preocupan de la represalia contra sus familiares que todavía están allá o contra ellos en caso de ser deportados.
Algunos inmigrantes han batallado para encontrar ayuda legal. La lista de proveedores de asesoría legal a bajo costo, o incluso gratis, que les entregaron las autoridades de Estados Unidos incluye organizaciones que se niegan a trabajar en territorio mexicano o han dudado mucho para hacerlo.
Las primeras audiencias para los casos de asilo en el centro de San Diego están programadas 45 días después de haber presentado la solicitud y las autoridades esperan agilizarlas.
El día de su comparecencia, a las personas en busca de asilo les pidieron presentarse en el cruce fronterizo para ser admitidos temporalmente a Estados Unidos y les ofrecieron transporte al tribunal. De no completarse sus casos, serán escoltados de vuelta a México para que continúen con la espera.
En una aparente falla de programación, algunas audiencias fueron cambiadas para el jueves pasado, reportó el periódico The San Diego-Union Tribune. Dos de las tres personas programadas para comparecer no llegaron al cruce fronterizo a tiempo.
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