TEGUCIGALPA, HONDURAS.- '
Ever, ¿Qué tiene mi hijo?' Es la primera y triste pregunta que hace una madre hondureña -entre lágrimas- a su esposo, mientras intenta abrazar a su pequeño hijo, a quien no veía desde hace aproximadamente tres meses y medio, producto de la política 'tolerancia cero' de Donald Trump.
En un vídeo proporcionado por Univisión se puede apreciar el comportamiento esquivo que el infante tiene con sus padres, quienes ahora son unos 'desconocidos' ante sus ojitos.
'¡Yo soy tu mami, papi, yo soy tu mami!' repite en medio del llanto la desconsolada madre al intentar cobijar con sus abrazos al indefenso Sammy, de 3 años de edad.
Al parecer, lo que sería un tierno reencuentro para la familia Reyes Mejía, terminó siendo una escena inolvidable en sus vidas, pues, Sammy en lugar de correr enérgico hacia sus brazos, simplemente busca la manera de huir de las personas que le dieron la vida.
'Mi hijo está traumado, Ever', lamentó la catracha, luego de otro intento fallido para tomarlo entre sus brazos -como la primera vez que supo que su bebé ya había nacido-.
Traumas, complejos y ansiedad son tan solo algunas de las impresiones emocionales que se plasman en las vidas de los menores que han tenido que pasar por situaciones difíciles a tan corta edad y sin la protección de sus progenitores por un determinado tiempo.
'Es evidente que el niño ha sufrido un abandono emocional y está huyendo de una situación amenazadora para él', aseguró la psicóloga Ángela Conway, tras ver el clip.
Por su parte, el padre del pequeño, relató que ambos estaban durmiendo en un centro de detención en Texas, Estados Unidos, el pasado mes de abril cuando de repente un custodio le dijo que tenía que presentarse ante un juez de migración.
A su vez, le mencionó que no había necesidad de despertar a su hijo, así lo hizo, sin imaginarse que esa era la última vez que lo vería y que tendría que esperar a que pasaran más de 100 días para que este desgarrador reencuentro se llevara a cabo.
La familia hondureña que dice haber huido de la violencia del territorio nacional, cree que la política del presidente Donald Trump de separar familias en la frontera dejó a su hijo con traumas que ya les están pasando una elevada factura.
Pues nada más doloroso para ellos que Sammy no los reconozca y tenga 'miedo' de recibir todo el amor que quieren darle.
Unos 2,500 menores de edad fueron separados de sus padres luego de que ellos cruzaran ilegalmente la frontera de México y Estados Unidos.
Vea aquí el vídeo de Univisón:
En un vídeo proporcionado por Univisión se puede apreciar el comportamiento esquivo que el infante tiene con sus padres, quienes ahora son unos 'desconocidos' ante sus ojitos.
'¡Yo soy tu mami, papi, yo soy tu mami!' repite en medio del llanto la desconsolada madre al intentar cobijar con sus abrazos al indefenso Sammy, de 3 años de edad.
Al parecer, lo que sería un tierno reencuentro para la familia Reyes Mejía, terminó siendo una escena inolvidable en sus vidas, pues, Sammy en lugar de correr enérgico hacia sus brazos, simplemente busca la manera de huir de las personas que le dieron la vida.
'Mi hijo está traumado, Ever', lamentó la catracha, luego de otro intento fallido para tomarlo entre sus brazos -como la primera vez que supo que su bebé ya había nacido-.
Traumas, complejos y ansiedad son tan solo algunas de las impresiones emocionales que se plasman en las vidas de los menores que han tenido que pasar por situaciones difíciles a tan corta edad y sin la protección de sus progenitores por un determinado tiempo.
'Es evidente que el niño ha sufrido un abandono emocional y está huyendo de una situación amenazadora para él', aseguró la psicóloga Ángela Conway, tras ver el clip.
Por su parte, el padre del pequeño, relató que ambos estaban durmiendo en un centro de detención en Texas, Estados Unidos, el pasado mes de abril cuando de repente un custodio le dijo que tenía que presentarse ante un juez de migración.
A su vez, le mencionó que no había necesidad de despertar a su hijo, así lo hizo, sin imaginarse que esa era la última vez que lo vería y que tendría que esperar a que pasaran más de 100 días para que este desgarrador reencuentro se llevara a cabo.
La familia hondureña que dice haber huido de la violencia del territorio nacional, cree que la política del presidente Donald Trump de separar familias en la frontera dejó a su hijo con traumas que ya les están pasando una elevada factura.
Pues nada más doloroso para ellos que Sammy no los reconozca y tenga 'miedo' de recibir todo el amor que quieren darle.
Unos 2,500 menores de edad fueron separados de sus padres luego de que ellos cruzaran ilegalmente la frontera de México y Estados Unidos.
Vea aquí el vídeo de Univisón: