Sus pasos, tan pequeños como sus piernas, pero tan rápidos cuando se trata de huir de la violencia, la falta de oportunidades o simplemente por no tener qué comer.
Algunos viajan solos, en compañía de un 'coyote' o con sus padres, pero de lo que no hay duda es que son el sector más vulnerable y quienes pagan por los problemas socio-políticos dentro de una nación.
Los niños hondureños están migrando masivamente hacia Estados Unidos y eso se ve reflejado en el informe mensual que presenta el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho), pues solo en los primeros 178 días de 2018 unos 4,409 menores han sido retornados.
Haciendo un pequeño cálculo matemático, esto significa que cada día 24 menores salían con destino al país norteamericano, es decir un niño cada hora.
El documento detalla que 1,624 eran niñas, mientras que 2,785 eran varones, retornados desde Estados Unidos, México y otros países centroamericanos.
Sin importar el recorrido, los asaltos y las políticas migratorias de Estados Unidos, los migrantes hondureños quieren alcanzar el 'sueño americano', aunque en el último mes eso significara la separación de unas 187 familias que equivale a 235 niños encerrados en 'jaulas', gracias a la política tolerancia cero.
La fotogrfía que conmovió al mundo fue la de una niña hondureña de dos años, quien llora mientras un agente fronterizo registraba a su madre. La fotografía ocupó las portadas de varios diarios, incluso en la revista Time, que puclicó una polémica creación donde aparece la menor y Donald Trump para decirle 'Welcome to America'.
El presidente Donald Trump prometió llegar a un acuerdo con el Congreso estadounidense para que aprobara un Ley migratoria, sin embargo el ente legislativo decidió postergar la votación para la próxima semana.
Las duras políticas del gobierno de Estados Unidos han causado zozobra entre los migrantes, sin embargo le temen más regresar a sus naciones y seguir viviendo bajo violencia y pobreza, según varios testimonios recopilados por la Agencia AFP.
Eso quedó evidencia en el vídeo en el que aparece un hondureño que le ruega a varios agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que lo dejen en la cárcel, pues no quiere regresar al país porque las pandillas lo matarán.
Según un informe del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), cada día dos niños mueren de forma violenta en Honduras, lo que da un promedio de 55 muertes al mes, la mayoría en total impunidad.
Expertos en migración afirman que esta situación es solamente una de las causas de la migración.
Un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) presentado en octubre de 2017, señala que el 57% de los centroamericanos de Honduras, Guatemala y El Salvador migran por la falta de comida.
Y en el caso de Honduras los departamentos de Francisco Morazán, Choluteca, Olancho y Cortés son los que presentan más desplazamientos, ya sea hacia Estados Unidos o España, y muchos de ellos son niños orillados a buscar un nuevo sueño lejos de la patria que los vio nacer.
TEGUCIGALPA, HONDURAS
Sus pasos, tan pequeños como sus piernas, pero tan rápidos cuando se trata de huir de la violencia, la falta de oportunidades o simplemente por no tener qué comer.
Algunos viajan solos, en compañía de un 'coyote' o con sus padres, pero de lo que no hay duda es que son el sector más vulnerable y quienes pagan por los problemas socio-políticos dentro de una nación.
Los niños hondureños están migrando masivamente hacia Estados Unidos y eso se ve reflejado en el informe mensual que presenta el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho), pues solo en los primeros 178 días de 2018 unos 4,409 menores han sido retornados.
Haciendo un pequeño cálculo matemático, esto significa que cada día 24 menores salían con destino al país norteamericano, es decir un niño cada hora.
El documento detalla que 1,624 eran niñas, mientras que 2,785 eran varones, retornados desde Estados Unidos, México y otros países centroamericanos.
Sin importar el recorrido, los asaltos y las políticas migratorias de Estados Unidos, los migrantes hondureños quieren alcanzar el 'sueño americano', aunque en el último mes eso significara la separación de unas 187 familias que equivale a 235 niños encerrados en 'jaulas', gracias a la política tolerancia cero.
La fotogrfía que conmovió al mundo fue la de una niña hondureña de dos años, quien llora mientras un agente fronterizo registraba a su madre. La fotografía ocupó las portadas de varios diarios, incluso en la revista Time, que puclicó una polémica creación donde aparece la menor y Donald Trump para decirle 'Welcome to America'.
El presidente Donald Trump prometió llegar a un acuerdo con el Congreso estadounidense para que aprobara un Ley migratoria, sin embargo el ente legislativo decidió postergar la votación para la próxima semana.
Las duras políticas del gobierno de Estados Unidos han causado zozobra entre los migrantes, sin embargo le temen más regresar a sus naciones y seguir viviendo bajo violencia y pobreza, según varios testimonios recopilados por la Agencia AFP.
Eso quedó evidencia en el vídeo en el que aparece un hondureño que le ruega a varios agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que lo dejen en la cárcel, pues no quiere regresar al país porque las pandillas lo matarán.
Según un informe del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), cada día dos niños mueren de forma violenta en Honduras, lo que da un promedio de 55 muertes al mes, la mayoría en total impunidad.
Expertos en migración afirman que esta situación es solamente una de las causas de la migración.
Un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) presentado en octubre de 2017, señala que el 57% de los centroamericanos de Honduras, Guatemala y El Salvador migran por la falta de comida.
Y en el caso de Honduras los departamentos de Francisco Morazán, Choluteca, Olancho y Cortés son los que presentan más desplazamientos, ya sea hacia Estados Unidos o España, y muchos de ellos son niños orillados a buscar un nuevo sueño lejos de la patria que los vio nacer.