El incidente ocurrió en el Polígono del Aguacate en Madrid, cuando el pastor Carlos Abigail, de 49 años, estaba en el tercera planta del solitario edificio junto a la menor.
“Yo trabajo en unas oficinas cercanas y sí que es cierto que los fines de semana suelen estar muchos evangelistas”, dijo una mujer identificada como Alba, refiriéndose a que la violación ocurrió un domingo.
Informes de la Policía señalan que el pastor se aprovechó de su posición eclesiástica y de la situación económica de la familia de la joven para abusar sexualmente de ella.
Aparentemente le ofrecía 50 euros por cada relación sexual, todo adentro de la iglesia.
La joven accedía debido a los chantajes del pastor, quien la amenazaba con difundir un video en el que aparecía desnuda; la joven había enviado el video a un amigo y el religioso estaba al tanto de eso.
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La madre de la menor fue quien puso la denuncia, en medio de consternación por feligreses y vecinos, quienes dijeron escuchar ruidos extraños.
El pastor hondureño es acusado de agresión sexual y de corrupción de menores, según dijo el portavoz de la Jefatura Superior de la Policía en Madrid.
“Me duele que se use el cristianismo para esto, es repudiable. Nosotros tomamos medidas preventivas para que estas cosas no sucedan. Todos los ministros de culto tienen que presentar los certificados penales cada año para saber si tienen antecedentes. También realizamos continuamente cursos de prevención y protocolos de actuación por toda España”, dijo Jorge Fernández, portavoz de la Federación de Entidades Evangélicas de España.