La intención del presidente Evo Morales de buscar un cuarto mandato consecutivo comenzó a potenciarse como elemento de discordia en la política boliviana, con marchas de rechazo de opositores y anuncios oficialistas de defender el deseo del gobernante indígena.
'Como Movimiento Al Socialismo (partido gobernante) vamos a generar grandes movilizaciones para defender este proceso y garantizar la repostulación de nuestro hermano Evo Morales' en los comicios de 2019, dijo este miércoles Leonardo Loza, dirigente de los cosechadores de coca, de quienes el presidente es su caudillo.
Las concentraciones y marchas en contra de los deseos de Morales se desataron la noche del martes en varias ciudades del país, como en Santa Cruz (este), donde un comité civil prometió 'defender la Constitución y las leyes', según su dirigente Fernando Cuéllar, un crítico del gobierno.
También puede leer: España da ultimátum a Cataluña para que diga si declaró independencia
Los organizadores cifraron la participación en unas 100 mil personas en toda Bolivia, pero el gobierno afirmó que no fueron más de 10 mil.
Los opositores rechazan un recurso presentado por el oficialismo para modificar la Constitución y permitir la reelección indefinida del presidente. EL Tribunal Constitucional admitió el pedido a trámite en septiembre, y tiene un plazo de dos meses para emitir un veredicto.
'Estamos ante el riesgo de enfrentar que se interrumpa el orden democrático y eso no se puede aceptar', afirmó el expresidente e historiador Carlos Mesa, a quien grupos civiles identifican como potencial contendor del izquierdista Morales, además del acaudalado empresario Samuel Doria Medina.
La oposición considera que la intención de Morales, amigo de Venezuela y Cuba y enconado crítico de Estados Unidos, viola de la Constitución, que impide una nueva postulación.
Morales comenzó a gobernar en 2006 y luego revalidó su mandato en elecciones populares para los periodos 2010-2015 y 2015-2020, modificando la Carta Magna.
Lo más visto: Los bienes incautados a la organización Matta Waldurraga
El ministro de la Presidencia, René Martínez, calificó las protestas como 'una movilización pírrica (que) deja sabor a poco, a pesar de la gran convocatoria que se hizo por las redes sociales'.
Mientras los opositores dijeron que utilizarán todos los mecanismos legales para frenar los deseos presidenciales, los oficialistas anunciaron que defenderán una nueva postulación de Morales por las mismas vías y también en las calles.