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Donald Trump firma decreto para poner fin a la separación de familias migrantes

El presidente de los Estados Unidos sorprendió este miércoles al anunciar la creación de esta nueva normativa

20.06.2018

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el miércoles un decreto para dejar de separar a las familias migrantes en la frontera con México, en medio de la creciente oposición a su política de 'tolerancia cero' hacia la inmigración ilegal.

El gobierno de Trump es objeto de fuertes críticas, tanto a nivel nacional como internacional, por la separación desde principios de mayo de más de 2,300 menores de sus padres inmigrantes, la mayoría de ellos huyendo de la violencia que asola Centroamérica.

'Queremos mantener a las familias juntas', dijo Trump en la Casa Blanca. 'Firmaremos una orden ejecutiva en breve', agregó, y señaló que esperaba que esto fuera en simultáneo con una legislación aprobada por el Congreso. La Cámara de Representantes prevé votar un proyecto de ley sobre el tema el jueves.

'No me gustó ver a las familias separadas', dijo el mandatario en la ceremonia de firma del decreto, después de anunciar más temprano, en un dramático cambio en su discurso, que iba a poner fin a esta controvertida práctica.

Las reacciones
La Cámara de Representantes prevé votar un proyecto de ley sobre el tema el jueves, dijo poco antes el presidente de la Cámara, Paul Ryan.

'No queremos que los niños sean separados de sus padres. Podemos hacer cumplir nuestras leyes de inmigración sin separar a las familias. La administración dice que quiere que el Congreso actúe y lo estamos haciendo', señaló.

'Mañana (jueves), la Cámara votará legislación para mantener juntas a las familias', añadió Ryan, principal republicano en el Congreso estadounidense.

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Los republicanos controlan la Cámara, pero para que esta ley sea aprobada debe pasar por el Senado, donde la mayoría oficialista es muy frágil (51-49).

Ryan dijo que la iniciativa que se someterá a votación el jueves prevé que las familias procesadas por ingresar ilegalmente al país ya no estén separadas, sino que permanezcan juntas bajo la custodia del Departamento de Seguridad Interior (DHS) durante todo el proceso legal en su contra.

'También se proporcionarán fondos adicionales para que el DHS tenga recursos suficientes para albergar y cuidar a las familias durante todo este proceso', dijo.

'En pocas palabras, vamos a tomar medidas para mantener unidas a las familias mientras hacemos cumplir nuestras leyes de inmigración'.

Fotografías desgarradoras y una grabación de audio en que se escucha llorar a muchos pequeños retenidos en un centro fronterizo, divulgadas en los últimos días, han provocado una tormenta de oposición al presidente Trump por su manejo de la inmigración ilegal.

Según cifras oficiales, entre el 5 de mayo y el 9 de junio, 2,342 niños y jóvenes inmigrantes han sido separados de sus padres en la frontera sur.

La separación familiar
La separación familiar no es nueva, pero era aplicada a discreción de los agentes de la patrulla fronteriza. Ahora nadie se salva, gracias a la reciente política de 'cero tolerancia' del presidente Donald Trump. Más de 2,000 niños han sido separados de sus padres desde el 19 de abril.

Los inmigrantes que entran a Estados Unidos ilegalmente por el límite con México, así como los que lo hacen pidiendo asilo, son enviados a un 'centro de detención' de la patrulla fronteriza.

Allí, los inmigrantes son retenidos en espacios cercados por vallas metálicas, divididos por edad y género. Los hermanos también pueden quedar separados. Esto puede durar 72 horas, hasta que el caso es resuelto o los niños son enviados a refugios del Departamento de Salud.

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Como estos centros de detención temporal comienzan a desbordarse por la llegada continua de niños separados de sus padres, surgen nuevas soluciones del gobierno.

El gobierno de Trump es objeto de fuertes críticas, tanto a nivel nacional como internacional, por la separación desde principios de mayo de más de 2,300 menores de sus padres inmigrantes, la mayoría de ellos huyendo de la violencia que asola Centroamérica.