EMIRATOS ÁRABES UNIDOS. -La familia del periodista saudita Jamal Khashoggi, asesinado en octubre en el consulado de su país en Estambul por agentes llegados desde Riad, negó este miércoles haber alcanzado un acuerdo con las autoridades sauditas.
'Actualmente se está llevando a cabo el juicio y no hubo ni hay ninguna negociación en curso ', indicó Salah, el hijo de Jamal Khashoggi, en Twitter.
'La gente que cometió y estuvo implicadas en este crimen' tiene que ser 'castigada', añadió.
El 1 de abril, el Washington Post, el periódico en el que colaboraba Khashoggi, afirmó que los hijos del periodista recibieron cada uno en compensación casas de varios millones de dólares y que cada mes reciben miles de dólares de las autoridades sauditas.
El asesinato de Khashoggi empañó considerablemente la imagen de Arabia Saudita y de su príncipe heredero, Mohammed bin Salmán, que los responsables turcos y estadounidenses consideran responsable.
Pero las autoridades sauditas negaron que el príncipe estuviera implicado en el asesinato, atribuido por Riad a elementos 'incontrolados'
Desde enero, once hombres están siendo juzgados en un tribunal penal en Riad. La fiscalía general pidió la pena de muerte contra cinco de ellos.
A pesar de la presión del congreso estadounidense, el presidente Donald Trump evitó condenar a Mohamed bin Salmán en este caso.
La agencia oficial saudita SPA indicó el miércoles que el príncipe heredero recibió una llamada telefónica la víspera de Trump, en la que ambos hablaron de relaciones bilaterales, cuestiones regionales y mundiales y 'medidas necesarias para combatir el terrorismo apoyado por el régimen iraní'.
'Actualmente se está llevando a cabo el juicio y no hubo ni hay ninguna negociación en curso ', indicó Salah, el hijo de Jamal Khashoggi, en Twitter.
'La gente que cometió y estuvo implicadas en este crimen' tiene que ser 'castigada', añadió.
El 1 de abril, el Washington Post, el periódico en el que colaboraba Khashoggi, afirmó que los hijos del periodista recibieron cada uno en compensación casas de varios millones de dólares y que cada mes reciben miles de dólares de las autoridades sauditas.
El asesinato de Khashoggi empañó considerablemente la imagen de Arabia Saudita y de su príncipe heredero, Mohammed bin Salmán, que los responsables turcos y estadounidenses consideran responsable.
Pero las autoridades sauditas negaron que el príncipe estuviera implicado en el asesinato, atribuido por Riad a elementos 'incontrolados'
Desde enero, once hombres están siendo juzgados en un tribunal penal en Riad. La fiscalía general pidió la pena de muerte contra cinco de ellos.
A pesar de la presión del congreso estadounidense, el presidente Donald Trump evitó condenar a Mohamed bin Salmán en este caso.
La agencia oficial saudita SPA indicó el miércoles que el príncipe heredero recibió una llamada telefónica la víspera de Trump, en la que ambos hablaron de relaciones bilaterales, cuestiones regionales y mundiales y 'medidas necesarias para combatir el terrorismo apoyado por el régimen iraní'.