MORELOS, MÉXICO.- Quedaron en medio de matorrales, ambos con una profunda herida en el cuello, pero solo uno sobrevivió. El cuerpo del niño de 11 años, que aún respiraba, fue encontrado horas después aferrado al cadáver de su padre en Morelos, uno de los estados más
peligrosos de México.
La cadena Univisión dio a conocer la lamentable noticia. Arnoldo, padre del menor, perdió la vida, mientras que su pequeño, Cristian, lo abrazaba con las pocas fuerzas que le quedaban.
Ambos, de origen guatemalteco, fueron encontrados cerca de la presa Puente Negro, municipio de Ocuituco, Morelos, por un poblador, quien llamó a las autoridades para que hicieran el levantamiento de los cuerpos. Para sorpresa, el menor seguía vivo.
Las investigaciones señalan que padre e hijo viajaban con otros dos familiares; todos fueron abandonados por los 'coyotes' y posteriormente secuestrados por Los Zetas, sin embargo, dos de ellos pudieron escapar.
El temido grupo delictivo pidió 12,000 dólares por la liberación de Cristian y Arnoldo, pero los parientes solo pudieron pagar 8,000, por lo que decidieron degollarlos.
En el hecho criminal murió Arnoldo, mientras que el pequeño fue llevado de emergencia a un centro asistencial.
El consulado de Guatemala dijo que el menor se encuentra en estado delicado, especialmente por la herida que tiene en su cuello.
En las imágenes se observa al niño acostado en una camilla con vendas alrededor de la garganta. Las fuertes instantáneas muestran la brutalidad con la que fue lastimado, mientras el niño permanece adormecido.
La cadena Univisión dio a conocer la lamentable noticia. Arnoldo, padre del menor, perdió la vida, mientras que su pequeño, Cristian, lo abrazaba con las pocas fuerzas que le quedaban.
Ambos, de origen guatemalteco, fueron encontrados cerca de la presa Puente Negro, municipio de Ocuituco, Morelos, por un poblador, quien llamó a las autoridades para que hicieran el levantamiento de los cuerpos. Para sorpresa, el menor seguía vivo.
Las investigaciones señalan que padre e hijo viajaban con otros dos familiares; todos fueron abandonados por los 'coyotes' y posteriormente secuestrados por Los Zetas, sin embargo, dos de ellos pudieron escapar.
El temido grupo delictivo pidió 12,000 dólares por la liberación de Cristian y Arnoldo, pero los parientes solo pudieron pagar 8,000, por lo que decidieron degollarlos.
En el hecho criminal murió Arnoldo, mientras que el pequeño fue llevado de emergencia a un centro asistencial.
El consulado de Guatemala dijo que el menor se encuentra en estado delicado, especialmente por la herida que tiene en su cuello.
En las imágenes se observa al niño acostado en una camilla con vendas alrededor de la garganta. Las fuertes instantáneas muestran la brutalidad con la que fue lastimado, mientras el niño permanece adormecido.