'Estoy lleno de culpa y remordimiento' por la manera en que manejé la crisis, dijo Ma Guoqiang, secretario del Partido Comunista Chino (PCC) en el municipio. 'Si hubiera tomado antes medidas restrictivas, el resultado habría sido mejor de lo que es hoy'.
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Los altos funcionarios chinos rara vez confiesan errores en público y, mucho menos, en la televisión en una hora de gran audiencia. Pero las autoridades de Wuhan están bajo la presión de la opinión pública.
Muchos chinos les reprochan haber tardado en difundir la información al comienzo de la epidemia, que ya provocó la muerte de más de 200 personas en el país. Para evitar la propagación del nuevo coronavirus 2019-nCoV, las autoridades pusieron en cuarentena el 23 de enero a Wuhan y otras aglomeraciones de la provincia de Hubei (centro).
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Pero Ma Guoqiang cree que debería haber tomado la medida diez días antes. 'La epidemia podría haberse atenuado, no habría llegado a ser lo que es hoy', subrayó. 'El impacto en las regiones del país habría sido menor y habría evitado muchas preocupaciones en el Comité Central del PCC y en el gobierno'.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el jueves que la epidemia se convertió en 'una emergencia de salud pública de alcance internacional'.
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