Sus vientos máximos sostenidos de 95 kilómetros por hora (60 millas por hora) convirtieron varias calles en ríos de corrientes rápidas y derribaron árboles y algunos cables eléctricos y telefónicos en Puerto Rico, que sigue recuperándose de huracanes y sismos anteriores.
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La Guardia Nacional rescató a por lo menos 35 personas, incluidos dos recién nacidos. Las autoridades en la localidad de Rincón, en el noroeste de la isla, reportaron a una mujer como desaparecida luego de que las aguas la arrastraron cuando trató de cruzar en auto un puente.
Los trabajadores del gobierno en República Dominicana utilizaron altavoces para exhortar a la gente a evacuar antes de la peor parte de la tormenta, y la policía arrestó a un puñado de surfistas en la capital Santo Domingo acusados de violar las alertas de tormenta del gobierno.
La región sur de Puerto Rico, que sigue registrando réplicas de los sismos, se vio particularmente afectada. Fuertes lluvias inundaron vecindarios debilitados por los temblores, causando el colapso de algunas viviendas que habían sido evacuadas recientemente.
Isaías se ubicaba a unos 400 kilómetros (250 millas) al sureste de las Bahamas el jueves por la tarde, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Se movía al noroeste a 31 km/h (20 mph). Se pronostica que su centro pase cerca del sureste de las Bahamas el viernes por la mañana.
Se emitieron alertas de tormenta tropical para las islas Turcas y Caicos y para algunas partes de República Dominicana, Haití y las Bahamas, así como para la costa este de Florida.
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La tormenta dejó sin electricidad a más de 400.000 clientes a lo largo y ancho de Puerto Rico, incluidos hospitales que tuvieron que recurrir a generadores, y dejó a unas 150.000 personas sin agua. Las cuadrillas abrieron las puertas de una represa que el mes pasado tenía niveles de agua tan bajos que las autoridades cortaron el servicio cada dos días a unos 140.000 clientes. También se reportaron apagones en las vecinas Islas Vírgenes de Estados Unidos.
Otros daños incluyeron la caída del 14% de las torres de telefonía en Puerto Rico, donde decenas de miles de personas siguen utilizando lonas como techos en viviendas que sufrieron destrozos por el paso del huracán María en septiembre de 2017.
Más de 50 personas buscaron refugio en Puerto Rico, dijo la gobernadora Wanda Vázquez, quien pidió a aquellos que viven cerca de ríos con crecidas que buscaran un sitio donde refugiarse. Pero muchos seguían recelosos de acudir a los albergues por un repunte de casos de COVID-19 en la isla.
Se prevé que Isaías arroje de 10 a 20 centímetros (4 a 8 pulgadas) de lluvia en todo Puerto Rico, República Dominicana y el norte de Haití, con máximos aislados de 25 centímetros (10 pulgadas).