La descomunal tarea de desmantelar, limpiar y reensamblar el instrumento musical más grande de Francia comenzó el lunes y se espera que dure casi cuatro años.
Una vez restaurado, tomará seis meses sólo afinar el órgano, según la agencia estatal que supervisa la restauración de Notre Dame. Su música no se espera que vuelva a sonar en el monumento medieval parisino hasta 2024, para consternación de los dedicados organistas de la catedral.
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“Es un órgano muy poderoso, pero también con mucha poesía”, dijo Johann Vexo, quien lo estaba tocando durante una misa nocturna el 15 de abril de 2019 cuando sonó la alarma de incendios. “Probablemente es el órgano más hermoso del mundo”.
Sorprendentemente, el órgano de 8,000 tubos sobrevivió el incendio de abril de 2019 que consumió el techo de la catedral y derribó su capitel. Pero las llamas cubrieron el instrumento de polvo de plomo tóxico que ahora debe removerse cuidadosamente.
Y aunque el órgano no se quemó, sí sufrió daños durante una ola de calor récord el verano pasado y se ha visto afectado por otras variaciones de temperatura desde que la catedral del siglo XII perdió su techo, dijo la agencia. Notre Dame se mantiene cerrada al público.
Expertos comenzaron a retirar las teclas del órgano el lunes y entonces retirarán sus tubos en un proceso de desmontaje que durará hasta finales de este año. Las piezas se colocarán en contenedores especiales dentro de la enorme catedral, donde se llevará a cabo la limpieza y restauración.
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El funcionario que encabeza la agencia dijo que el órgano, que data de 1733, volverá a tocarse el 16 de abril de 2024, en el quinto aniversario del incendio. El organista Vexo ya sueña con ese día.
“Como todos mis colegas, estamos muy tristes y sabemos que tendremos que ser muy pacientes en los próximos años”, dijo a The Associated Press el lunes afuera de la catedral. Expresó su esperanza de que puedan “encontrar el edificio e instrumentos exactamente como eran antes, o casi exactamente. Estamos aguardando ese día... en que el edificio reabra”.
El presidente Emmanuel Macron espera que la catedral pueda volver a abrir a tiempo para los Juego Olímpicos de 2024 en París. Pero ha tomado más de un año limpiar los peligrosos residuos de plomo, así como andamios colocados antes del incendio para un esfuerzo previo de renovación, y la reconstrucción de Notre Dame aún ha comienza.
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