Según han revelado varios medios brasileños, Josimare Gomes da Silva, de 30 años, arrancó lo ojos y cortó la lengua de su pequeña para comérsela.
El abuelo de la pequeña fue quien encontró a su hija en lo que parecía estar orando por el cuerpo de Brenda Carollyne Pereira da Silva y la lengua de la niña dentro de su boca.
El relato del anciano dice que tocó la puerta del baño donde estaba encerrada su hija y su nieta desde hace un tiempo, Josimare contestó que se estaban bañando y él las dejó tranquilas.
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Tiempo después vio que corría sangre en el desagüe en el exterior de la casa por lo que rompió la puerta del baño y encontró a la niña muerta en el baño y la madre rezando al lado del cuerpo.
Hasta el momento las investigaciones señalan que la madre habría utilizado una tijeras para agredir a la niña.
Josimare fue interrogada por las autoridades y negó ser la responsable y brindó una declaración confusa sobre el hecho en varios idiomas, incluido el español.
De acuerdo al diario Folha de Alagoas, la madre padece de trastornos mentales, depresión y cuando cometió el crimen sufría un episodio psicótico. La mujer dijo que había matado un demonio y que su hija estaba viva.
