Autoridades colombianas desarticularon una red internacional de narcoazafatas que se encargaban de lavar dinero.
Según revelaron medios internacionales, en las últimas horas se capturó a 13 personas en la operación “Pájaro Azul” en la que participaron en Estados Unidos, España, Mexico y Colombia.
En la detención se cayeron cinco azafatas que se presume se dedicaban a transportar dinero en compartimientos falsos y que serían empleadas del capturado “Chapo” Guzmán.
Los detenidos serán juzgados por los delitos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito de particulares y concierto para delinquir y pueden ser condenados a penas que oscilan entre 10 y 20 años de cárcel.
Según la Fiscalía, las capturas en Colombia se produjeron después de nueve registros en Bogotá, dos en Medellín (noroeste), una en Montería (norte) y otro en Ibagué (centro).
Las autoridades estiman que el continuo ingreso de esos recursos derivó en un lavado de por lo menos unos 3,1 millones de dólares.
Por su lado, Avianca dijo que las autoridades colombianas detuvieron a diez personas vinculadas con la aerolínea, las que quedaron a órdenes de la Fiscalía.
Por su parte, el diario El Tiempo de Colombia, esta organización blanqueaba dineros de diferentes narcotraficantes, entre los que destacan Joaquín “Chapo” Guzmán, Dayro Antonio Usuga (alías Otoniel) y los líderes del cartel de Los Rastrojos.
Se estima que la red movía hasta 250 millones de dólares por año, sin importar los arrestos y que llevaba blanqueando dólares por más de 20 años.
Homero Prieto Rivera, alias 'el Tío', es señalado como uno de los integrantes de la organización. Es el contacto con los narcotraficantes colombianos y mexicanos de al menos cuatro carteles, según el expediente al que tuvo acceso El Tiempo.
Prieto Rivera, que fue detenido en Medellín, es dueño de una cadena de casas de cambio que le servía para recibir y entregar el dinero de la mafia. Uno de sus cuñados se desempeña como congresista del estado de Sinaloa, territorio de Joaquín 'El Chapo' Guzmán.
Narcoazafatas
Los documentos revelan que las bellas azafatas eran elegidas por Magnolia Ramírez, una auxiliar de vuelo de Avianca.
Junto con ella trabajaba Jaime Rufino Blanco, un sobrecargo con residencia en un lujoso apartamento y dueño de vehículos de alta gama.
John López Arjona es quien llevaba parte del dinero que traían las azafatas hasta Perú y Bolivia para el envío de cargamentos de droga con destino a Estados Unidos y Europa.
