CALIFORNIA, ESTADOS UNIDOS.-Con carrozas fúnebres esperando, los equipos de rescate reforzaron el domingo la búsqueda de cuerpos entre los escombros humeantes de la localidad de Paradise, al tiempo que los familiares buscaban desesperadamente a más de 1
00 personas desaparecidas en los incendios forestales del norte y el sur de California que siguen avanzando.
La cifra de muertes por estos siniestros en el estado se mantuvo en 25, pero es muy probable que aumente.
Por lo menos cinco equipos de rescate trabajaban en Paradise _una localidad de 27,000 habitantes que en gran parte fue destruida el jueves por las llamas_ y en comunidades circundantes del norte de California. Las autoridades convocaron a un laboratorio ambulante de ADN y a antropólogos para que ayuden a identificar a las víctimas del incendio forestal más destructivo en la historia de la entidad.
Para el domingo en la tarde, una de las dos carrozas fúnebres negras que estaban estacionadas en Paradise había recogido otro conjunto de restos.
La gente que buscaba a sus amigos o parientes llamó a centros de evacuación, hospitales y a la oficina del forense.
Sol Bechtold manejó de un albergue a otro buscando a su madre, Joanne Caddy, una viuda de 75 años cuyo hogar se incendió junto con el resto de su vecindario en Magalia, al norte de Paradise. Vivía sola y no conducía.
Bechtold publicó un anuncio en las redes sociales, lo colocó en los tableros de avisos de los albergues y le mostró su fotografía a los evacuados, preguntando a ver si alguien la reconocía. Se topó con algunos de los vecinos de su madre, pero ninguno la había visto.
Mientras conducía entre el humo y la bruma hacia otro albergue, dijo: “También estoy bajo una oscura nube emocional. Tu madre está en algún lugar y no sabes dónde. No sabes si está a salvo”.
“Tengo que mantenerme positivo”, afirmó. “Ella es una mujer fuerte e inteligente”.
Las autoridades y familiares mantenían la esperanza de que muchos de los que se desconoce su paradero estuvieran a salvo y simplemente no tuvieran teléfono u otras formas para contactar a sus familias y amigos. El Departamento de Policía del afectado condado norteño estableció un centro de llamadas para personas desaparecidas con el fin de ayudar a contactar a la gente.
Más de 8.000 bomberos combatían tres incendios forestales que ardían en aproximadamente 1,040 kilómetros cuadrados (400 millas cuadradas) en el norte y sur de California, con equipos que seguían llegando para proporcionar ayuda y vientos tempestuosos que comenzaban a soplar nuevamente.
Las peores llamas estaban en el norte del estado, donde el número de personas fallecidas en ese incendio era de por lo menos 23, lo que lo convierte en el tercero más letal de la entidad. Dos personas fueron halladas muertas en un incendio forestal en el sur de California, donde las llamas arrasaron con las mansiones de Malibú y con los suburbios de la clase trabajadora de Los Ángeles por igual.
Los dos cuerpos gravemente quemados fueron encontrados frente a la cochera de una residencia en Malibú, donde viven muchas celebridades.
Muchos residentes tuvieron que evacuar sus casas, incluida la cantante Lady Gaga, Kim Kardashian West y Martin Sheen. El actor Gerard Butler publicó en Instagram que la mitad de su casa ubicada en Malibú había desaparecido, y el publicista de Camille Grammer Meyer dijo que la estrella del programa “Real Housewives of Beverly Hills” había perdido su hogar en el enclave costero.
Las llamas también asediaban a T housand Oaks, una ciudad del sur de California que está de luto por la masacre de 12 personas en un tiroteo en un bar de música country el miércoles por la noche.
La cifra de muertes por estos siniestros en el estado se mantuvo en 25, pero es muy probable que aumente.
Por lo menos cinco equipos de rescate trabajaban en Paradise _una localidad de 27,000 habitantes que en gran parte fue destruida el jueves por las llamas_ y en comunidades circundantes del norte de California. Las autoridades convocaron a un laboratorio ambulante de ADN y a antropólogos para que ayuden a identificar a las víctimas del incendio forestal más destructivo en la historia de la entidad.
Para el domingo en la tarde, una de las dos carrozas fúnebres negras que estaban estacionadas en Paradise había recogido otro conjunto de restos.
La gente que buscaba a sus amigos o parientes llamó a centros de evacuación, hospitales y a la oficina del forense.
Sol Bechtold manejó de un albergue a otro buscando a su madre, Joanne Caddy, una viuda de 75 años cuyo hogar se incendió junto con el resto de su vecindario en Magalia, al norte de Paradise. Vivía sola y no conducía.
Bechtold publicó un anuncio en las redes sociales, lo colocó en los tableros de avisos de los albergues y le mostró su fotografía a los evacuados, preguntando a ver si alguien la reconocía. Se topó con algunos de los vecinos de su madre, pero ninguno la había visto.
Mientras conducía entre el humo y la bruma hacia otro albergue, dijo: “También estoy bajo una oscura nube emocional. Tu madre está en algún lugar y no sabes dónde. No sabes si está a salvo”.
“Tengo que mantenerme positivo”, afirmó. “Ella es una mujer fuerte e inteligente”.
Las autoridades y familiares mantenían la esperanza de que muchos de los que se desconoce su paradero estuvieran a salvo y simplemente no tuvieran teléfono u otras formas para contactar a sus familias y amigos. El Departamento de Policía del afectado condado norteño estableció un centro de llamadas para personas desaparecidas con el fin de ayudar a contactar a la gente.
Más de 8.000 bomberos combatían tres incendios forestales que ardían en aproximadamente 1,040 kilómetros cuadrados (400 millas cuadradas) en el norte y sur de California, con equipos que seguían llegando para proporcionar ayuda y vientos tempestuosos que comenzaban a soplar nuevamente.
Las peores llamas estaban en el norte del estado, donde el número de personas fallecidas en ese incendio era de por lo menos 23, lo que lo convierte en el tercero más letal de la entidad. Dos personas fueron halladas muertas en un incendio forestal en el sur de California, donde las llamas arrasaron con las mansiones de Malibú y con los suburbios de la clase trabajadora de Los Ángeles por igual.
Los dos cuerpos gravemente quemados fueron encontrados frente a la cochera de una residencia en Malibú, donde viven muchas celebridades.
Muchos residentes tuvieron que evacuar sus casas, incluida la cantante Lady Gaga, Kim Kardashian West y Martin Sheen. El actor Gerard Butler publicó en Instagram que la mitad de su casa ubicada en Malibú había desaparecido, y el publicista de Camille Grammer Meyer dijo que la estrella del programa “Real Housewives of Beverly Hills” había perdido su hogar en el enclave costero.
Las llamas también asediaban a T housand Oaks, una ciudad del sur de California que está de luto por la masacre de 12 personas en un tiroteo en un bar de música country el miércoles por la noche.