MOSCOU, RUSIA. -El grupo paramilitar ruso Wagner comenzó este jueves a traspasar al ejército ruso sus posiciones en la ciudad ucraniana de Bajmut, que afirma haber conquistado tras meses de feroces combates con las fuerzas de Kiev.
Este relevo se produce cuando el ejército ruso está en dificultades en los flancos de Bajmut. Según Kiev, perdió 20 km2 al norte y al sur de la ciudad frente a las fuerzas ucranianas.
También ocurre tras una incursión de combatientes llegados de Ucrania el lunes y martes en la región rusa fronteriza de Belgorod, que Moscú tardó más de 24 horas en repeler, poniendo de relieve una vez más las dificultades de las fuerzas rusas.
“Hoy estamos retirando las unidades de Bajmut. De aquí al 1 de junio, la mayor parte se trasladará a bases de retaguardia”, dijo el jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin, en un video difundido por su servicio de prensa.
“Estamos entregando las posiciones a los militares”, añadió Prigozhin.
En las imágenes se lo ve saludando a sus hombres y dándoles consignas. Esta vez no lanzó invectivas contra el Estado Mayor ruso, contra el cual está en conflicto.
“Nos retiramos, descansamos, nos preparamos y recibiremos nuevas instrucciones”, señaló Prigozhin.
Ganna Maliar, viceministra ucraniana de Defensa, confirmó que las tropas de Wagner cedieron sus posiciones a las tropas regulares rusas “en la periferia de Bajmut”.
“Las unidades de Wagner siguen en la ciudad de Bajmut”, dijo Maliar, quien añadió que los soldados ucranianos aún controlan un suburbio al suroeste de Bajmut.
Esta ciudad industrial de unos 70.000 habitantes antes del conflicto es el escenario de la batalla más larga y mortífera de la ofensiva rusa lanzada en febrero de 2022.
Prigozhin admitió el miércoles que unos 10.000 de los 50.000 presos reclutados en las cárceles rusas murieron en Ucrania, donde se encontraban en primera línea en la batalla de Bajmut.
Una proporción similar de sus combatientes profesionales también murió en combate, agregó, sin precisar la cifra exacta.
El jefe de Wagner afirmó el sábado que capturó “hasta el último centímetro” de Bajmut tras meses de combates que destruyeron casi por completo la ciudad.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, negó la pérdida de Bajmut. El ejército ucraniano afirmó que seguía controlando una zona “insignificante” de la ciudad, pero que continúa avanzando por sus flancos.
Ucrania espera seguir avanzando en los flancos de Bajmut con el objetivo de lograr un “cerco táctico” de la ciudad.
“El enemigo intenta detener nuestro avance en los flancos con disparos de artillería. Está reforzando los flancos con unidades adicionales”, afirmó Maliar.
“Aterrorizando Ucrania”
Zeleski acusó a Rusia de seguir “aterrorizando” a su país, y dijo que su ejército derribó 36 drones rusos en ataques durante la noche.
“Seguramente el enemigo buscaba golpear infraestructura clave y sitios militares en el sur del país”, precisó el ejército ucraniano.
Asimismo, las autoridades prorrusas de la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014, dijeron haber derribado seis drones ucranianos por la noche.
Entretanto Japón anunció que desplegó aviones cazas tras haber detectado dos aeronaves rusas de “reconocimiento” cerca de sus costas, una en el océano Pacífico y otra en el mar de Japón.
Este incidente, que no es el primero de este tipo, tiene lugar unos días después de la participación de Zelenski en la cumbre del G7 que se organizó en Hiroshima (oeste de Japón).
En Rusia, las autoridades se enfrentaron el lunes y el martes a una incursión armada de un grupo de combatientes procedentes de Ucrania.
Esta operación fue reivindicada por dos grupos rusos que combaten en el bando ucraniano, cuyos representantes han sido identificados como figuras de la nebulosa ultraderechista rusa.
Una de estas organizaciones, la legión “Libertad de Rusia”, que Moscú considera como “terrorista”, lamentó dos muertos y diez heridos en esta incursión.
Moscú, por su parte, afirma haber “aplastado” al grupo con aviones y artillería, y haber matado a “más de 70 personas”.
En el ámbito diplomático, Rusia anunció que el emisario chino Li Hui, enviado por Pekín a Europa para discutir una solución política al conflicto de Ucrania, visitará Moscú el viernes para realizar “consultas”.