PARÍS, Francia
Cincuenta y siete periodistas murieron en el mundo en 2016 ejerciendo su profesión, a los que se suman nueve 'periodistas-ciudadanos' (blogueros) y ocho 'colaboradores' de medios de prensa, según el informe anual de Reporteros Sin Fronteras (RSF) publicado este lunes.
El país más mortífero para la prensa fue Siria, con 19 víctimas mortales, seguido por Afganistán (10), México (9), Irak (7) y Yemen (5), precisó la oenegé.
En 2015, fueron 67 los periodistas muertos, recordó RSF.
'Esa disminución significativa se explica por el hecho de que cada vez más periodistas huyen de los países demasiado peligrosos: Siria, Irak, Libia, pero también Yemen, Afganistán, Bangladés o Burundi, que se han convertido en agujeros negros de la información donde reina la impunidad', explica RSF.
La gran mayoría de los periodistas murieron en sus propios países, salvo cuatro que perdieron la vida cuando cubrían una información en el extranjero.
Con 19 víctimas en 2016 comparadas con 9 en 2015, Siria se convirtió en el país más peligroso para ejercer el reporterismo.
A su vez México, donde fueron asesinados 9 periodistas en 2016, es el país de América más mortífero para la profesión.
Al menos 780 periodistas fueron asesinados en los diez últimos años debido a su profesión, según las estadísticas de RSF.
Cincuenta y siete periodistas murieron en el mundo en 2016 ejerciendo su profesión, a los que se suman nueve 'periodistas-ciudadanos' (blogueros) y ocho 'colaboradores' de medios de prensa, según el informe anual de Reporteros Sin Fronteras (RSF) publicado este lunes.
El país más mortífero para la prensa fue Siria, con 19 víctimas mortales, seguido por Afganistán (10), México (9), Irak (7) y Yemen (5), precisó la oenegé.
En 2015, fueron 67 los periodistas muertos, recordó RSF.
'Esa disminución significativa se explica por el hecho de que cada vez más periodistas huyen de los países demasiado peligrosos: Siria, Irak, Libia, pero también Yemen, Afganistán, Bangladés o Burundi, que se han convertido en agujeros negros de la información donde reina la impunidad', explica RSF.
La gran mayoría de los periodistas murieron en sus propios países, salvo cuatro que perdieron la vida cuando cubrían una información en el extranjero.
Con 19 víctimas en 2016 comparadas con 9 en 2015, Siria se convirtió en el país más peligroso para ejercer el reporterismo.
A su vez México, donde fueron asesinados 9 periodistas en 2016, es el país de América más mortífero para la profesión.
Al menos 780 periodistas fueron asesinados en los diez últimos años debido a su profesión, según las estadísticas de RSF.