Washington, Estados Unidos
Para el representante demócrata Luis Gutiérrez, de ascendencia puertorriqueña, no hay otro asunto más importante en el debate presupuestario, que proteger a cientos de miles de jóvenes inmigrantes de la deportación.
Para el representante demócrata Luis Gutiérrez, de ascendencia puertorriqueña, no hay otro asunto más importante en el debate presupuestario, que proteger a cientos de miles de jóvenes inmigrantes de la deportación.
El futuro de estos inmigrantes, que fueron traídos al país de manera ilegal cuando eran niños, es uno de los temas más espinosos por resolver, ahora que la Casa Blanca y el Congreso tratan de evitar una parálisis en las operaciones del gobierno, algo que nadie quiere.
Los demócratas de la cámara baja y su líder, Nancy Pelosi, insisten en que se resuelva la problemática de los llamados dreamers, como se les conocer a estos jóvenes inmigrantes, como parte del paquete integral que conjunta los pendientes legislativos, incluyendo gasto militare, ayuda para desastres y atención médica de bajo costo para menores de edad.
'¿Quieres un presupuesto bipartidista y quieres mi voto? Entonces propón un presupuesto estadounidense, que eventualmente incluya la posibilidad de que nuestros dreamers puedan ser libres', dijo Gutiérrez. 'Es lo correcto'.
Al líder de la bancada demócrata en el Senado Chuck Schumer también le importan los dreamers, pero él no va a poner todo en riesgo por la inmigración. Sus prioridades políticas se centran en los 10 candidatos demócratas al Senado que buscan la reelección el próximo año en estados donde el presidente Donald Trump ganó en el 2016. Muchos de ellos no quieren tener nada que ver con una parálisis del gobierno por inmigración.
'Entiendo de dónde viene tanto fervor. No estoy en favor de votar por cerrar el gobierno', dijo el senador demócrata Joe Manchin, de West Virginia, donde Trump ganó con casi el 70% del voto. 'Hay muchas cosas que me entusiasman. Pero no voy a hacer sufrir a 300 millones de personas porque no puedo hacer que el proceso funcione como debería'.
Los demócratas de ambas cámaras están divididos mientras los líderes tratan de concretar un acuerdo sobre gastos para el 22 de diciembre y así evitar un cierre.