CABO SAN LUCAS, MÉXICO.- El huracán Hilary se degradó este sábado a categoría 1 mientras se desplaza cerca de la península de Baja California, en el noroeste de México, en donde las lluvias han dejado algunos daños en infraestructura y una persona fallecida, para después dirigirse al sur de California, en Estados Unidos.
Hacia las 06H00 GMT del domingo, el huracán presentaba vientos máximos sostenidos de 140 km/h y se ubicaba a 145 km de Punta Eugenia, una población en el centro de la península de Baja California, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos(NHC).
El NHC dijo que Hilary está provocando fuertes lluvias en partes de la península y en el suroeste de Estados Unidos.
La velocidad de sus vientos lo convierte en un huracán de categoría 1 en la escala de Saffir-Simpson. Pese a ser degradado desde la categoría 4 que había alcanzado, el huracán aún puede provocar fuertes lluvias e inundaciones.
Las autoridades meteorológicas mexicanas pronosticaron lluvias intensas para la noche del sábado y madrugada del domingo con descargas eléctricas y riesgo de inundación en gran parte del país, y pidieron a la población extremar precauciones ante el alto oleaje y el riesgo de desbordamiento de ríos y arroyos.
“Sí se sintió bastante”
La coordinación de Protección Civil del gobierno mexicano dijo en un comunicado que hubo un aumento importante en el nivel de los niveles de ríos y arroyos, así como deslaves y cortes carreteros en los municipios de Loreto y Mulegé en Baja California Sur.
Añadió que una persona murió luego de que su vehículo fuera arrastrado por una corriente en Santa Rosalía, en la localidad de Mulegé.
La estatal Comisión Federal de Electricidad desplegó 800 trabajadores, 64 plantas de emergencia y cientos de vehículos y grúas para atender eventuales cortes de luz en Baja California y Baja California Sur.
Desde el viernes, varios negocios en el turístico balneario de Los Cabos, un destino ubicado en Baja California Sur y frecuentado por turistas internacionales, colocaron sacos de arena ante el aumento del oleaje y guardaron muebles y enseres.
“Anoche tomamos todas las medidas. La infraestructura está bien y solamente estamos al pendiente de los trabajadores, esperando el clima y que todos estén bien”, dijo el sábado a la AFP Omar Olvera, de 34 años y trabajador de un restaurante ubicado en la playa protegido con costales de arena para evitar que se inunde con el aumento del oleaje.
En el poblado de Todos Santos, ubicado en la costa oeste de la península, había pocas personas en la calle mientras que en Cerritos, una playa cercana, el acceso al mar estaba cerrado por el oleaje intenso, constató la AFP.
“Anoche sí se sintió bastante el airecito, no fue tan fuerte como esperábamos pero no deja de causar cierto temor”, dijo Marco Segura, un trabajador de 57 años, en Cerritos.
“Tenemos que seguir, el huracán no nos tiene que parar, recuperar todo lo que se nos fue, todo lo que nos falta y pues seguir adelante”, añadió.
Impacto durante el fin de semana
Por su parte, el gobierno de Baja California, estado fronterizo con Estados Unidos y en donde se ubica la ciudad de Tijuana, habilitó refugios temporales para la población.
Se prevé que Hilary se mueva cerca de la costa oeste de la península de Baja California durante el fin de semana para llegar al sur de California, Estados Unidos, la tarde del domingo, dijo el NHC.
El NHC añadió que Hilary se irá debilitando a medida que se interne en aguas frías del Océano Pacífico y que llegue al sur de California como tormenta tropical.
México sufre cada año el embate de huracanes tanto en su costa pacífica como atlántica, habitualmente entre mayo y noviembre.
