El Papa emérito, Joseph Ratzinger, aseguró que renunció al Pontificado por un designio de Dios, durante una entrevista a una fuente que pidió el anonimato, informó la agencia Zénit.
Benedicto XVI, que ahora reside en el monasterio Mater Ecclesiae, recibe visitas de forma esporádica, en las que ha manifestado la labor del Espíritu Santo sobre su sucesor, de quien reconoce su gran carisma.
De acuerdo a la agencia católica, el predecesor de Francisco I, habla de cómo la decisión de dimitirse ha sido una inspiración divina y no comenta ni da declaraciones que podrían ser entendidas como las palabras del otro Papa.
Sobre su renuncia, Ratzinger habría dicho a uno de los huéspedes de los escasos encuentros: 'Me lo dijo Dios', asegura Zénit.
Además, habría aclarado que no se trató de una aparición o fenómeno de este tipo, sino 'una experiencia mística', en la que el Todopoderoso hizo nacer en su corazón 'un deseo absoluto' de quedarse solo en oración con Él.
El religioso sostuvo además que su 'experiencia mística' se ha prolongado durante estos meses y que cuanto más observa el carisma de Francisco, más entiende que su decisión fue la voluntad de Dios.
Benedicto XVI visitó el pasado fin de semana Castel Gandolfo, el palacio que lo albergó después de que presentara su renuncia como máximo líder de la Iglesia Católica.
En la residencia de verano de los pontífices, desde Urbano VIII, Ratzinger paseó por los jardines del palacio, rezó el rosario y asistió a un concierto de música clásica tocado con el piano.
Joseph Ratzinger anunció su renuncia como Papa el pasado 11 de febrero.
La histórica dimisión provocó sorpresa en el mundo, que se mantuvo atento a la elección del nuevo Papa, la cual recayó en el argentino Jorge Mario Bergoglio, quien adoptó el nombre de Francisco I.