CIUDAD DE MÉXICO, MÉXICO.-México entregó a
Estados Unidos una nota diplomática en la que rechaza los 'discursos de odio' y el concepto de 'supremacía blanca' tras el ataque de un extremista en un supermercado de
El Paso, Texas, que dejó 22 muertos, incluidos ocho mexicanos.
En el documento difundido este miércoles por el gobierno y enviado a la embajada de E stados Unidos, México también demanda a Washington que en el marco de acuerdos de asistencia judicial le entregue información sobre si hay otros 'sujetos' o 'potenciales organizaciones de 'supremacía blanca' que busquen poner en peligro' a mexicanos.
'Los discursos de odio no deben tener lugar en nuestras sociedades. El concepto de 'supremacía blanca' (...) resulta contrario a la convivencia pacífica en cualquier lugar del mundo. Estas ideas únicamente generan divisiones nocivas y violencia', añade.
El sábado pasado, Patrick Crusius, un joven extremista blanco desempleado de 21 años que viajó desde los suburbios de Dallas a El Paso, vecina a la mexicana Ciudad Juárez, y con un arma automática abrió fuego en el WalMart más visitado por hispanos.
Críticos del presidente estadounidense Donald Trump han denunciado que su retórica antiinmigración atiza la violencia racial.
En su nota diplomática, el gobierno mexicano no aludió en forma directa a los discursos contra los migrantes de Trump, aunque hizo votos para que la condena contra el ataque expresada por el mandatario estadounidense se convierta en una realidad.
Reiteró además que el ataque fue un 'acto terrorista' contra mexicanos.
Unos 20 minutos antes de llegar al supermercado, Crusius publicó un manifiesto supremacista blanco en el foro de internet 8chan titulado 'Una verdad inconveniente' en el que explicaba que el ataque era una 'respuesta a la invasión hispana de Texas'.
Este miércoles fue repatriado a Ciudad Juárez el primer cuerpo de los ocho mexicanos que murieron en el ataque. Se trata de Elsa Mendoza Márquez, una maestra de 57 años que cruzó la frontera con su esposo y su hijo para ir de compras. Sus familiares se quedaron en su automóvil y sobrevivieron al ataque.
En el documento difundido este miércoles por el gobierno y enviado a la embajada de E stados Unidos, México también demanda a Washington que en el marco de acuerdos de asistencia judicial le entregue información sobre si hay otros 'sujetos' o 'potenciales organizaciones de 'supremacía blanca' que busquen poner en peligro' a mexicanos.
'Los discursos de odio no deben tener lugar en nuestras sociedades. El concepto de 'supremacía blanca' (...) resulta contrario a la convivencia pacífica en cualquier lugar del mundo. Estas ideas únicamente generan divisiones nocivas y violencia', añade.
El sábado pasado, Patrick Crusius, un joven extremista blanco desempleado de 21 años que viajó desde los suburbios de Dallas a El Paso, vecina a la mexicana Ciudad Juárez, y con un arma automática abrió fuego en el WalMart más visitado por hispanos.
Críticos del presidente estadounidense Donald Trump han denunciado que su retórica antiinmigración atiza la violencia racial.
En su nota diplomática, el gobierno mexicano no aludió en forma directa a los discursos contra los migrantes de Trump, aunque hizo votos para que la condena contra el ataque expresada por el mandatario estadounidense se convierta en una realidad.
Reiteró además que el ataque fue un 'acto terrorista' contra mexicanos.
Unos 20 minutos antes de llegar al supermercado, Crusius publicó un manifiesto supremacista blanco en el foro de internet 8chan titulado 'Una verdad inconveniente' en el que explicaba que el ataque era una 'respuesta a la invasión hispana de Texas'.
Este miércoles fue repatriado a Ciudad Juárez el primer cuerpo de los ocho mexicanos que murieron en el ataque. Se trata de Elsa Mendoza Márquez, una maestra de 57 años que cruzó la frontera con su esposo y su hijo para ir de compras. Sus familiares se quedaron en su automóvil y sobrevivieron al ataque.
