La presencia dela joven embarazada detrás de Barack Obama no fue azarosa. Karmel Allison estaba allí como un ejemplo de que la reforma sanitaria impulsada por el mandatario demócrata, y aprobada por el Congreso en 2010, es necesaria.
Tras haber sido diagnosticada de diabetes tipo 1 a los 9 años, debió afrontar crecientes gastos de seguro médico desde entonces. Deseosa de cambiar de empresa por mucho tiempo, no se animaba ahacerlo por temor a que ninguna la aceptara por su enfermedad.
Gracias al Obamacare, finalmente pudo cambiar a un servicio que la tratara como acualquier otra paciente, según informó la Casa Blanca.
Por ese motivo estaba emocionada de asistir al discurso del presidente. La combinación de su emoción con su embarazo probablemente hayan confluido en que le bajara la presión y comenzara a tambalear.
De no haber sidopor quienes estaban a su alrededor y por Obama, que al ver lo que ocurría interrumpió su alocución y la atrapó, habría caído al suelo, con consecuencias mucho mayores. Por eso, quedó doblemente agradecida con el mandatario.
'Estoy bien gente, solo un poco mareada. ¡Gracias @BarackObama por atraparme! Que bueno que esta embarazada diabética esté embarazada :)', escribió luego a través d esu cuenta de Twitter.