Tapachula, México.-Policías municipales de Tapachula, la mayor ciudad de la frontera sur de México, regalaron este lunes rosca de Reyes (conocida en otros países como roscón) y chocolate caliente a migrantes que están varados en las calles.
Los efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana Municipal (SSP y PCM) entregaron un pedazo del pan que simboliza la visita de los Reyes Magos al niño Jesús cada 6 de enero.
El titular de esta dependencia, Óscar Manuel Martínez Chávez, aseguró que esta es una muestra de solidaridad con caminantes internacionales que pasan estas fiestas en la frontera lejos de sus familias.“Traemos un número considerable de roscas que quisiéramos tener para toda la gente de calle, desgraciadamente. Es un gesto que nosotros estamos dando aquí y hay que compartirlo con todos los que se puedan”, declaró el oficial a los medios.
La rosca se entregó en el acceso principal de la Secretaría de Seguridad Pública, donde miles de migrantes buscan trámites para conseguir una cita de la aplicación de la Oficina de Aduana y Protección Fronteriza de Estados Unidos, ‘CBP One’, y hay un campamento improvisado cercano a las oficinas migratorias.
En este Día de Reyes, los migrantes que duermen en la calle, en su mayoría de Venezuela y Centroamérica, piden como regalo conseguir sus citas para pedir asilo y un lugar digno para dormir en lo que esperan sus papeles, comentó a EFE el venezolano Javier Antonio.
”Lo que queremos en realidad es que (el Instituto Nacional de) Migración nos apoye en un sitio donde podamos estar bien y no nos estén discriminando, y nos apoyen con alimentos no queremos más nada”, expresó.
María Salas, quien era profesora en Venezuela, pidió al Gobierno mexicano oportunidades de trabajo para vivir dignamente en lo que esperan su cita.
“No tengo dinero para avanzar, ni para alquilar, no consigo trabajo, tengo más de cinco días buscando en el centro y no consigo trabajo, primero porque no consigo papeles y no soy nacional, voy para cualquier trabajo y no puedo, estamos vendiendo en la calle”, contó a EFE.
El hecho ilustra el desafío que supone la migración récord en México, que detectó más de 925.000 migrantes irregulares de enero a agosto pasado, una subida interanual de casi el 132 %.