Rebel Wilson revela secretos de su vida y carrera en “Rebel Rising”

Por Alexandra Alter | The New York Times

Hace unos cinco años, cuando tenía 39 años, la actriz Rebel Wilson acababa de cosechar una serie de éxitos, habiendo ganado 20 millones de dólares por sus papeles en “Pitch Perfect 3: La Última Nota”, “¿No Es Romántico?” y “Maestras del Engaño”. Pero una visita a un médico especialista en fertilidad la había llenado de dudas.

Su peso —que entonces superaba los 100 kilos— podría dificultar recuperar óvulos viables, dijo el médico. Después de la cita, llamó a su agente de talentos y le dijo que planeaba mejorar su salud.

Su agente no se emocionó. “A la agencia le agradaba que yo estuviera gorda porque recibían cientos de miles de dólares en comisiones por cada película en la que interpretaba a la chica gorda y chistosa”, escribe en sus nuevas memorias, “Rebel Rising”. Le preocupaba que perder peso pudiera poner en peligro su “casilla multimillonaria”.

Wilson escribe con una franqueza cautivadora. Criada en un suburbio de Sydney, Australia, como la mayor de cuatro hermanos, tuvo una infancia poco convencional: su familia criaba beagles de exhibición y Wilson tuvo su primer contacto con el mundo del espectáculo como adiestradora de perros cuando tenía 8 años.

Wilson fue rechazada cinco veces por el Instituto Nacional de Arte Dramático de Australia y audicionó para casi 30 papeles en Hollywood antes de ser elegida para la comedia del 2011 “Damas en Guerra”, actuación que lanzó su carrera cinematográfica.

“Rebel Rising” contiene revelaciones personales. Wilson escribe sobre perder su virginidad a los 35 años. Detalla su relación secreta con una tenista profesional, su experiencia al enamorarse de su prometida, la empresaria de moda Ramona Agruma, y tener un bebé con una madre subrogada.

En una entrevista reciente, Wilson habló sobre la forma en que su pérdida de peso ha afectado su trayectoria y su imagen pública.

En el primer capítulo, escribes sobre tu temor de que perder peso perjudicaría su carrera. ¿Has experimentado alguna repercusión negativa?

Hubo algunas personas que dijeron, oh, ya no creemos que sea chistosa o ahora me ha perdido como fan porque ya no puedo identificarme con ella. Pero creo que si leen el libro entenderán mi viaje con el peso y la salud.

¿Qué es lo que más te preocupa hacer público?

La parte de perder la virginidad a los 35. Eso era algo que absolutamente nadie sabía. Y pensé, ¿debería ponerlo en el libro? Pero luego pensé, tal vez habrá otras personas que florecieron tarde y podrían encontrar consuelo en ese hecho.

Describes tu relación romántica con una tenista profesional. ¿Te preocupaba que pudieras sacar del clóset a esa persona?

No creo que nadie lo adivine jamás. Y no quiero que mis memorias violen su privacidad.

Describes cómo pudiste negociar 10 millones de dólares por “Pitch Perfect 3” tras enterarte de que el estudio realizó una encuesta de investigación de mercado que mostró cuánto amaba la gente a tu personaje, “Gorda Amy”.

Universal Studios es increíble, pero ¿ganaron toneladas de dinero con las películas de “Pitch Perfect”? Sí. Entonces, a pesar de que absolutamente adoro a toda esa gente en Universal, ¿utilicé esa influencia a mi favor? Sí.

También escribes sobre una extraña experiencia que te inspiró cuando vivías en Sudáfrica y contrajiste malaria.

Fue una alucinación hecha y derecha de que yo era actriz y había ganado un Premio de la Academia. Cambió toda la trayectoria de mi vida. Cuando algunas personas decían: “¿Pero cómo seguiste adelante?” o “Siempre parecías creer en ti misma”, yo respondía: “Porque lo vi suceder”.

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