Hoy 1 de julio, a lo largo de la mitad norte de Norteamérica, 34 millones de canadienses estarán celebrando el cumpleaños 144 de su país. Habrá asados del Día de Canadá en las playas del Pacífico en Vancouver, juegos tradicionales aborígenes arriba en el Círculo Ártico en Nunavut y regatas en los puertos de Nueva Escocia en el Océano Atlántico.
El primer ministro Stephen Harper será el anfitrión de la fiesta más grande de todas, con invitados especiales como el Duque y la Duquesa de Cambridge en representación de nuestra Reina, disfrutando de forma informal de un festival musical de todo el día en los jardines frente a los edificios del Parlamento Canadiense.
Ese día los canadienses no estaremos celebrando una guerra de independencia o una revolución. Estaremos celebrando un paso fundamental en nuestra evolución nacional. Fue en 1867 que a través de la Confederación, los canadienses se unieron para formar una sola nación llamada Canadá.
Después de 144 años de duro trabajo y cooperación, llegamos a ser una nación próspera, democrática, apegada al derecho y multicultural. Por supuesto, también enfrentamos los mismos retos que otras naciones. Demasiados canadienses todavía sufren la pobreza, el crimen y la discriminación. Pero siempre hemos encontrado la forma de superar nuestras diferencias y enfrentar nuestros retos.
Los canadienses tienen mucho en común con los hondureños. Ambos buscamos la prosperidad, la seguridad y la democracia. Ambos buscamos la paz, el buen gobierno, la protección de los derechos humanos, el estado de derecho, el respeto al medio ambiente y prevenir la corrupción. Por eso, las relaciones entre Canadá y Honduras son estrechas.
Durante los últimos dos años aquí en Honduras, Canadá se ha mantenido muy activo en la promoción de esfuerzos para lograr una salida pacífica a la crisis política. Estamos muy complacidos de ver a Honduras bajo el liderazgo del presidente Porfirio Lobo, promoviendo una agenda de reconciliación nacional. Estamos seguros de que bajo su dirección, Honduras seguirá por este camino, incluyendo la próxima publicación del reporte de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación.
Honduras ha sido un socio de la cooperación canadiense por más de cuatro décadas. Esto es símbolo claro de la solidaridad que existe entre ambos países y nuestra gente. Desde 1969 hasta la fecha, la Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional (ACDI) ha invertido más de $420 millones en Ayuda Oficial para el Desarrollo en este país.
Hoy día, Honduras es un país de concentración para recibir ayuda para el desarrollo de Canadá y el único en Centroamérica bajo esa categoría. Estamos colaborando directamente con el gobierno de Honduras y apoyamos por lo tanto el excelente trabajo de la sociedad civil hondureña y canadiense.
La expansión del comercio bilateral y la inversión canadiense en Honduras son una prioridad clave de la Embajada. Canadá mantiene una fuerte relación comercial con Honduras, con más de $250 millones en comercio bilateral y más de $600 millones en inversión directa canadiense, en sectores como textiles, minería y lotería.
Es con todo esto en mente que quiero desearles un feliz Día de Canadá a todos y todas en Honduras. Mi compromiso y el de mi equipo en la Embajada es trabajar todos los días por hacer de las relaciones entre Canadá y Honduras unas cada vez más fuertes, año con año.
