Columnistas

50 años impulsando la iniciativa privada

Hace 50 años nació el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) con el propósito de unir al sector empresarial en una iniciativa privada impulsora de transformaciones y bienestar para todos.

Surge siguiendo la visión de nuestros próceres y el anhelo de varias generaciones de grandes hombres y mujeres que amaron este país.

En este instante pasan por mi mente los expresidentes del Cohep: Gabriel A. Mejía, Albert Smith, Camilo Rivera Girón y Jorge Gómez Andino (QDDG), escuelas de liderazgo, grandes exponentes, maestros de muchos que quisimos emularlos en su accionar.

En este cincuentenario me pregunto si como dirigentes empresariales y como organización hemos cumplido con la misión establecida. Estimo que es muy importante que cada uno de los diferentes liderazgos nos evaluemos, que cada uno se sienta bien o mal con su participación, como su conciencia le diga.

No olvidemos que es sumamente importante que quienes lideran la iniciativa privada sean propositivos y busquen siempre el diálogo; que los encuentros no sean para hablar sobre intereses particulares o de grupos, sino para impulsar el cambio nacional.

Honduras es un país con tantos recursos que necesita de empresarios con verdadero empuje, capaces de modificar una realidad que en algunos lugares es grotesca ante tanta pobreza y miseria. Entendamos que nuestra gente quiere una nación con oportunidades, con garantías sociales, democracia y desarrollo.

Por eso el actuar del consejo empresarial es fundamental ya que como órgano representativo del sector de la iniciativa privada es el que discute con los gobiernos cuáles son las acciones a seguir para la formulación de políticas públicas sanas con reglas claras de transparencia y rendición de cuentas.

El futuro del Cohep es prometedor no solo porque hay un reconocimiento de la sociedad, sino porque existe la voluntad de asumir un papel más protagónico en un mundo cambiante, donde se ha visto que no es por el lado del estatismo ni tampoco de la privatización que saldremos adelante, sino que es necesario una visión común y un emprendedurismo para alcanzar una transformación equitativa y justa.

Trabajemos juntos para cumplir la misión, un día las generaciones lo reconocerán y agradecerán.