El entusiasmo de los mercados financieros estadounidenses se está empezando a enfriar. “Según Peter Berezin, estratega global jefe de BCA Research, los inversores tienen razón en ser cautelosos. Berezin acaba de elevar al 75% la probabilidad de una recesión en Estados Unidos en los próximos 12 meses como respuesta a la victoria de Donald Trump en las urnas”. ¿En qué se basa el jefe de BCA? “La esencia del razonamiento de Berezin es que cualquier beneficio para la economía proveniente de los recortes de impuestos y la desregulación de Trump no sería suficiente para contrarrestar el daño causado por los recortes selectivos del gasto gubernamental y los aranceles a las importaciones”.
Se espera una extensión total de la Ley de Reducción de Impuestos y Empleos (TCJA, por sus sigla en inglés) y posiblemente la reducción de la tasa de impuestos corporativos de un 21% al 15% para los fabricantes nacionales. De acuerdo con Berezin: “Esas políticas pueden ayudar al crecimiento y a las ganancias corporativas, pero pueden ser contrarrestadas por recortes al gasto, ya que muchos republicanos están interesados en recortar el costo para el gobierno de Medicaid, los cupones de alimentos, la asistencia para la vivienda y otros programas dirigidos a los pobres”.
Berezin agrega que aunque la mayoría de esos programas “no son enormes en términos absolutos, generan efectos multiplicadores (económicos) considerables porque sus destinatarios generalmente gastan cualquier ingreso o pago de transferencia que reciben”. Además de la reducción de impuestos y el recorte de gastos, “están los aranceles propuestos por Trump, y Berezin es menos optimista que muchos en cuanto a que se trata principalmente de una táctica de negociación. “Para Trump, los aranceles no son un medio para un fin; son el fin en sí mismos. Trump realmente quiere construir un muro arancelario alrededor de Estados Unidos”.
Un reciente estudio del Budget Lab de Yale “estima que los aranceles de Trump reducirían el ingreso real disponible de la familia estadounidense en una media entre 1,900 y 7,600 dólares. “Incluso si ese dinero se canalizara íntegramente hacia recortes de impuestos, el impacto neto sobre la demanda agregada sería negativo porque los aranceles perjudican desproporcionadamente a los consumidores de bajos ingresos con una alta propensión marginal a gastar”.
Berezin resume sus ideas diciendo que: “Con la economía más débil de lo que generalmente se percibe, y con el espectro de una nueva guerra comercial en el horizonte, estamos elevando nuestra probabilidad de recesión de 12 meses en Estados Unidos del 65% al 75%”. De esa manera, tanto la reducción de impuestos a las corporaciones, como el recorte de varios gastos, combinados con mayores aranceles para China Popular (60%) y para otros países (10%), terminarán provocando una recesión en los Estados Unidos en los próximos 12 meses.
Tanto las medidas económicas y arancelarias que implementará Trump, como la amenaza de una recesión dentro de un año, son pésimas noticias para Latinoamérica y Honduras en particular, ya que los productos que exportamos hacia la nación estadounidense no resisten un análisis de “sensibilidad de precios”, que al incrementarse reducirán las precarias ganancias de muchas empresas, que operan con mucha dificultad.