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Por una Madre Tierra: Mejorar las adquisiciones públicas con bajas emisiones de carbono

La Madre Tierra nos pide que actuemos. Los océanos se llenan de plásticos y se vuelven más ácidos. El calor extremo, los incendios forestales, las inundaciones y otros eventos climáticos afectan a millones de personas. Todavía nos enfrentamos al COVID-19 y sus secuelas, una pandemia sanitaria mundial con una fuerte relación con la salud de nuestro ecosistema.

El cambio climático está generando grandes alteraciones que ya podemos ver de manera clara en varias partes de nuestro continente: desde más y mayores huracanes en el Caribe, hasta sequías en Centro y Sudamérica —con los consecuentes incendios forestales que generan más deforestación y degradación del suelo, cayendo un círculo catastrófico que acelera el ritmo de destrucción del planeta—.

Todos y todas podemos contribuir a hacer frente al cambio climático y apostar por la sostenibilidad. A nivel individual, Naciones Unidas ha lanzado una campaña titulada “Actúa ahora”, que brinda pautas para que cada persona pueda realizar pequeñas acciones para reducir el número de emisiones que generamos en nuestra vida diaria.

A nivel de los gobiernos, como parte de sus compromisos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) los países deben continuar su trabajo para reducir sustancialmente las emisiones de gases de efecto invernadero y así limitar el aumento de la temperatura global en este siglo a 2 °C. Además, es necesario que colaboren juntos a fin de adaptarse a los impactos del cambio climático, compartiendo prácticas para aumentar la resiliencia al clima.

En este sentido hay dos puntos que quisiera destacar y que no siempre son tomados en cuenta como parte de las iniciativas de mitigación y adaptación climática.

El primero es la importancia de planificar, ejecutar y gestionar infraestructura sostenible que permita resistir la fuerza de fenómenos naturales, incluyendo perturbaciones climáticas cada vez más fuertes y sin que afecten el clima local y al mismo tiempo contribuyan a construir un entorno más inclusivo para todas las personas.

Repensar soluciones en favor de una infraestructura resiliente no significa única y exclusivamente obras más robustas, sino que sean equitativas, accesibles, asequibles y empoderadoras, respetando al mismo tiempo el principio de “no causar daño”. El reciente informe de UNOPS sobre infraestructura inclusiva para la acción climática brinda varias recomendaciones respecto a este enfoque.

El segundo punto a destacar es que podemos aprovechar mucho más el potencial de las adquisiciones públicas para luchar contra el cambio climático. La pandemia nos ha mostrado la importancia del buen funcionamiento de las cadenas de suministro, y unas cadenas de suministro más verdes pueden proteger los recursos naturales, impulsar la transición a economías con bajas emisiones de carbono y apoyar a los países en la adaptación al cambio climático.

Si consideramos que el gasto público significa entre el 15% y el 30% en la mayoría de los países, ¿las adquisiciones públicas pueden ser un camino? Claro que sí: los gobiernos avanzarían en sus objetivos nacionales para ser cada vez más sustentables y al mismo tiempo, aumentarían la resiliencia de las cadenas de suministro en su entorno. Mejorar las adquisiciones buscando opciones con bajas emisiones de carbono —que sean diversas e inclusivas y que beneficien a todas las personas por igual— podrían reforzar nuestras medidas de adaptación al clima y al mismo tiempo hacer frente a las desigualdades.

Desde UNOPS estamos comprometidos a apoyar y hacer frente a la emergencia climática, ayudando a los países a tomar decisiones estratégicas para que su futura infraestructura sea resiliente y permita reducir el riesgo de desastres naturales; y desarrollando capacidades para aprovechar el potencial de las adquisiciones públicas, de manera que se puedan obtener mejores resultados para las personas y el planeta. Como ha dicho el Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, no tenemos más que una Madre Tierra y todos y todas debemos hacer todo lo posible para protegerla.