La pandemia del covid-19 no debe hacernos olvidar a las y los hondureños que el dengue es otra enfermedad que sigue causando muerte y dolor entre la población, y que es imperativo que los ciudadanos mantengan las medidas de prevención de esta enfermedad.
Tampoco podemos olvidar que el virus del dengue se transmite por mosquitos hembra, principalmente de la especie Aedes aegypti, y que estos mosquitos, que también transmiten la fiebre chikungunya, la fiebre amarilla y la infección por el virus de zika, están casi siempre dentro de nuestros hogares y en sus alrededores.
Las autoridades sanitarias están preocupadas porque los casos de dengue siguen subiendo en las diferentes regiones, por lo que llaman a mantenerse alerta y observar permanentemente las acciones recomendadas para eliminar los criaderos de zancudos y evitar que la población se contagie.
Con ello se estaría dando un gran respiro a un deficiente sistema sanitario que se está viendo actualmente rebasado por la alta demanda de enfermos por covid-19 a nivel nacional.
Que la pandemia del covid-19 no nos haga olvidar que la primera línea de defensa está en las manos de cada uno de los ciudadanos y que ello nos obliga no solo a redoblar la lucha en contra del mortal mosquito, sino también a aprovechar el tiempo del confinamiento para mantener los hogares libres de criaderos.
También es urgente buscar ayuda médica inmediatamente al observar los primeros síntomas de la enfermedad, ya que los médicos dicen que la mayoría de los pacientes con dengue están llegando tarde a los hospitales por temor a contagiarse de covid-19.
El dengue es real, el dengue también mata. Para prevenir esta enfermedad cada quien debe hacer su parte.